POLITICA
maurice closs

Un gobernador K llamó a un acuerdo para “pasar el 2014”

El mandatario de Misiones, aliado del Gobierno, comparó la situación económica actual con el final de Alfonsín y De la Rúa.

Sorpresa. Ayer, descolocó al Ejecutivo y a los opositores.
| Telam

Esta vez no fue la “derecha golpista” ni un dirigente de la oposición. Fue un gobernador peronista aliado a la Casa Rosada el que pidió, ayer, lograr un gran acuerdo político y social para impedir que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner “termine” como el de los radicales Raúl Alfonsín y Fernando de la Rúa.

El autor intelectual del pedido fue el misionero Maurice Closs, que visualiza un final trágico si no se actúa de manera urgente.
Alfonsín adelantó la entrega del bastón presidencial, agobiado por la hiperinflación y los saqueos. Algo similar le ocurrió a De la Rúa, que interrumpió su mandato, se fue en helicóptero de la Casa Rosada y abrió un proceso en el que hubo cinco presidentes en una semana.
¿Tan grave es la situación que atraviesa la administración kirchnerista? Según Closs, es “compleja, por la devaluación como consecuencia de las variables macroeconómicas que desde el 1º de mayo del año pasado vengo advirtiendo que estaban mal”.

Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

“Lo que se requiere en estos momentos es una actitud responsable, por eso convoco a un acuerdo político, social y económico para pasar el 2014, que no es un año cualquiera”, advirtió el gobernador de Misiones. Siguiendo con su tono temerario, Closs se explayó: “Hay crisis fuertes que pueden terminar como en las últimas décadas, porque todos los actores no estuvieron a la altura y se terminó en la ida anticipada de Alfonsín o en la crisis de 2001”.

Closs marcó así distancia de la Casa Rosada, pero también utilizó la “crisis” para justificar el impuestazo a los ingresos brutos que impulsó en su provincia junto con una tasa a la producción de yerba mate, sobre la cual tuvo que dar marcha atrás. Es de suponer que, luego de estas declaraciones, el mandatario provincial no sea bienvenido en el gobierno nacional.

Las provincias están implementando el ajuste que la Nación no se anima a poner en práctica porque se contrapone con su discurso de mantener “caliente” la economía incentivando el consumo. El problema es que el drenaje de las reservas del Banco Central está haciendo estragos en la economía kirchnerista y la inflación, también.

Por eso –dijo Closs– no hay que presionar a cada sector en beneficio propio, sino que “debemos trabajar mancomunadamente, porque Argentina se merece una transición tranquila. Necesitamos que en 2014 las variables estén ordenadas y no es momento de echar más leña al fuego”. ¿Supone Closs que si no hay un acuerdo social no habrá una transición tranquila? ¿Piensa que si eso no se pone en marcha el Gobierno no llega al final del mandato? Sus frases, filosas, generaron malestar en la Casa Rosada.