POLITICA
revista Noticias

Victoria Bereziuk, la viuda negra del Valijagate

Viajó en el avión de la valija maldita y coqueteó con Antonini y Uberti. La historia prohibida de la rubia más temida. Galería de imágenes.

1017bereziuk468
| Silvia Bordoni
Cuando estaba con ella, Guido Alejandro Antonini Wilson la llamaba "Vicky". A sus espaldas, entornando los ojos y entre risotadas, le decía "el pedazo". "¿Llamamos al pedazo?", le preguntaba con gesto cómplice a Daniel Uzcátegui Spetch, el joven veinteañero que lo acompañaba en sus correrías y que participó junto a él de la historia de los 800.000 dólares negros decomisados en el Aeroparque Jorge Newbery, que según la investigación del FBI estaban destinados a la campaña de Cristina Fernández.

"El pedazo" es Victoria Carolina Bereziuk, la sensual y rubia secretaria del funcionario echado por el valijagate, Claudio "Ubi" Uberti. No sólo había encandilado con sus artes de femme fatale a Antonini y al joven Uzcátegui -hijo del ex vicepresidente de PDVSA, la petrolera estatal venezolana de la que salieron los dólares de la valija maldita-, sino también a su jefe Uberti y a otros hombres influyentes de Caracas y Buenos Aires. Al venezolano que hoy colabora con el FBI en el juicio en Miami lo conquistó sin dificultades. "Alex, ¿querés casarte conmigo?", coqueteó por su celular y largó su risita encantadora.

Antonini reaccionó como era previsible, festejó la propuesta de matrimonio y pocas horas después subió al avión del escándalo con ella y su amigo Uzcátegui. "Vicky" Bereziuk los había invitado a él y al joven a acompañarla a Buenos Aires para conversar allí con su jefe Uberti sobre negocios conjuntos y obras públicas. "Por qué no vienen, hablan de sus temas con Claudio y salimos allá? Quedá lugar en el avión", les sugirió.  Antes de esa oferta, Antonini y Uzcátegui le habían propuesto una noche de copas y diversión en Caracas.

El coqueteo ocurrió en las horas previas a la madrugada del 4 de agosto del 2007 y siguió cuando ya habían aterrizado en Aeroparque. Antonini hoy afirma que cargó con la valija como un "gesto caballeresco": se anticipó a la secretaria de Uberti, el verdadero dueño de esa plata negra, según declaró ante los jueces de Miami.  ¿Acaso hubiera llevado esa maleta de no haber sido por la galante ansiedad de su pretendiente venezolano?

Noticias la sorprendió saliendo de la Universidad Di Tella, donde cursa un seminario. 

Lea la nota completa en la edición impresa de la Revista Noticias.