Aún no asumió en su cargo y ya generó ruido interno. Y fuerte ruido. Mientras termina de ordenar su flamante casa en la base aérea de Morón, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, deberá lidiar en los próximos días con un dilema político: cómo contener a su gabinete para que no choque con el flamante ministro de la Producción, Joaquín de la Torre, peronista e intendente de San Miguel.
Mientras se prepara la reforma de la Ley de Ministerios, que implicará la creación de un Ministerio de Ciencia y Tecnología, De la Torre aguarda para asumir. Sin embargo, su figura, y acaso sus formas, ya preanuncian que no tendrá un buen vínculo con parte del “equipo” de Vidal.
Según pudo reconstruir Perfil, el intendente intentó, en vano, quedarse con el ministerio de Seguridad que ocupa Cristian Ritondo en medio del caos por la reforma de la Policía Bonaerense y las críticas al jefe de la fuerza, Pablo Bressi. De la Torre ofreció sus servicios para hacerse cargo de la cartera y “ordenar” a los intendentes con las policías locales. Fue rechazado.
Luego, cuando Vidal le ofreció formalmente el cargo, pidió quedarse con varias áreas que hoy tiene el secretario General, Fabián Perechodnik. Por caso, la Agencia de Inversiones de la Provincia. En este caso, fue Federico Salvai (ministro de Gobierno y mano derecha de la gobernadora) quien le dijo que no.
Pero no fue todo: en La Plata no son pocos los que creen que, a pesar del buen vínculo que lo une a Vidal (quien alguna vez pensó en llevarlo como candidato a vicegobernador cuando De la Torre era massista aún), sus frecuentes cambios de humor y la exigencia que suele imprimirle la gobernadora a la gestión podrían complicarlo en el día a día.
“Es un cacique del conurbano y, aunque tiene buena relación con sus pares, queremos ver cómo se adapta al sistema de gestión, con reuniones semanales y Power Points”, le contó a este portal uno de los hombres fuertes de la Gobernación.
Así y todo, la jugada de Vidal de sumar a De la Torre se dio justo cuando comenzó a verse un claro acercamiento de la gobernadora con los intendentes peronistas no kirchneristas. En ese marco, De la Torre podría ser uno de los nexos con ellos para un futuro político conjunto. Claro que antes debería no pisarse con el armador político, Federico Salvai. Cuestión de ministros.