El abogado Mariano Bergés, que representa a la denunciante Spinazzola SA (ex concesionaria de publicidad en refugios de colectivos), presentó un escrito ante el juez Norberto Oyarbide para poder acceder a la causa por el mobiliario urbano, un negocio de 120 millones de pesos anuales que se inició lugo que se denunciaran una serie de irregularidades vinculadas a la presentación de documentos "ideológicamente falsos" por parte de una de las empresas ganadoras y anomalías en la adjudicación.
Según pudo saber el Diario Perfil, Berges busca determinar si hubo escuchas ilegales vinculadas a la licitación de mobiliario urbano.
“Como el procesamiento de Macri quedó confirmado por la Cámara, y en esa causa hay manifestaciones relativas a escuchas y distintos teléfonos intervenidos, queremos saber si existen comunicaciones entre los Terranova y la gente de Macri. Creemos que es posible que haya varios teléfonos pinchados de empresarios vinculados al negocio de mobiliario urbano”, planteó el abogado.
El titular de la empresa, Augusto Ibero Spinazzola, apuntó directo a Avila: “Estuvo interesado en participar de la licitación y quedó afuera del pliego. Fue espiado por Ciro James, tal como figura en el expediente, con lo cual es muy posible que haya sido escuchado por este tema, ya que uno de los negocios más importantes que tiene es el de la publicidad exterior. Queremos que se investigue esto”.
El propio Carlos Avila no descartó que haya relación entre ambas causas: “No sé si las escuchas son por eso, creo que no, pero nada se puede descartar. Lo que sí, en la causa de mobiliario urbano hay un acto de corrupción tremendo. Más allá de mi caso, el problema del mobiliario es tan grave como las escuchas, es corrupción pura”.