Si hay algo que César Pelli supo desarrollar fue su talento. “Siempre tuve facilidad para descubrir la estructura de las cosas, para manejar las proporciones y balancear los espacios. Además, me gusta descubrir la clave de cada proyecto. Todos los proyectos tienen una clave y encontrarla puede ser apasionante”, dijo en alguna oportunidad este prestigioso arquitecto que ayer falleció a los 92 años. “Con mucho pesar recibimos la triste noticia del fallecimiento. Quiero hacer llegar mis condolencias a toda su familia, sus amigos y a su equipo de trabajo”, fueron las palabras del gobernador de Tucumán, Juan Manzur, el primer funcionario en expresar sus condolencias en redes.
Una de sus obras más famosa la constituyen las Torres Petronas, en Kuala Lumpur, que desde 1998 y hasta mediados de 2003 fueron los edificios más altos del mundo. “Creo que mi herencia argentina y latinoamericana me impulsa a crear espacios públicos de reunión. En todos mis proyectos he tratado de crear plazas y he creado muchas y muy exitosas”, destacó en una oportunidad este hombre que había nacido el 12 de octubre de 1926. A los 16 años ya había terminado el Colegio Nacional y siguió luego Arquitectura. Con el tiempo descubrió que le gustaba dibujar mansiones. A los 28 años obtuvo una beca para capacitarse en los Estados Unidos y desde entonces residió allí.
Pelli fue decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Yale entre 1977 y 1984. A su vez fue distinguido con la medalla de oro del The American Institute of Architects (Instituto Estadounidense de Arquitectos). En 2012 la Fundación Konex le otorgó el Premio Konex de Brillante como la figura más relevante de las artes visuales de Argentina de la década.
La obra de Pelli se encuentra en todo el mundo. En Madrid se llevó a cabo la construcción de la Torre de Cristal, uno de los cuatro rascacielos que se levantaron en el complejo empresarial Cuatro Torres Business Area.También la Torre Iberdrola en Bilbao, el edificio más alto de Vizcaya, la torre IFC,en Hong Kong; el aeropuerto de Washington; el Carnival Center of Arts de Miami; y en Argentina, por ejemplo, la torra de YPF/Repsol, en Puerto Madero.