Charly Garcia tuvo un pico de presión y le dieron el alta

Viernes por la noche, el Coliseo Cubierto El Campín de Bogotá, Colombia, estallaba. Fito Páez ya había hecho lo suyo precalentado lo que sería una fiesta para todos los seguidores del ícono del rock que se preparaba tras bambalinas. Sin embargo, una vez que el intérprete de Mariposa tecknicolor se despidió del escenario, éste quedó vacío. Las palmas de los espectadores hicieron sentir la ansiedad y el cansancio de la espera por el ídolo del rock hasta que un promotor del espectáculo salió a escena y dio la peor de las noticias: “Charly tuvo que ser internado por un supuesto preinfarto y se suspende el show”. Hoy el susto pasó a ser sólo eso. No sólo se desmintió la causa de su internación, sino que, además, al mediodía de ayer, el cantante fue dado de alta y al cierre de esta edición se preparaba para dar el show suspendido.
“Luego del análisis de todos los exámenes de rutina que descarten un problema mayor, el paciente ha sido dado de alta y tiene permiso para continuar con su labores diarias de manera normal”, decía el parte médico. “Charly está completamente fuera de peligro, el estudio dio bien. Hará el concierto esta noche, no hay ningún problema”, indicó desde Colombia José Palazzo, productor del cantante, apenas le dieron el alta el sábado al mediodía. Sobre las primeras versiones que indicaban un infarto del músico, aclaró: “El promotor de acá dijo que fue un infarto, una bestialidad, no pasó nada de eso. Charly nunca tuvo malestar físico antes del concierto. Cuando estaba por vestirse para salir, le tomaron la presión y ahí dio alta. Se la bajaron con un té de coca y frío en la cabeza, y le hicieron un electro ahí mismo: con ese resultado, el doctor vio algo que lo llevó a pedir el traslado a una clínica, para ampliar la información”.
Bogotá está a 2.640 metros sobre el nivel del mar, lo que para quienes no están acostumbrados puede generar malestar y una alteración en la presión. Por eso, y para evitar cualquier complicación posterior, Charly fue llevado hasta la Fundación Santa Fe de Bogotá, al norte de la capital. Allí permaneció internado un día, pero sólo por control y monitoreo, ya que los demás estudios que le realizaron dieron bien.