PROTAGONISTAS
escandalo internacional

El francés que desprestigió el premio Nobel de Literatura

Jean Claude Arnault, esposo de una integrante de la Academia sueca, fue acusado de abuso y de filtrar nombres de ganadores.

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pareja. Arnault y su mujer Katarina Frostenson, en una gala. | afp

La Academia sueca suspendió solamente dos veces la entrega del Nobel de Literatura. La primera fue en 1943 y tuvo relación con la Segunda Guerra Mundial. Más de setenta años después, el hecho vuelve a ocurrir, pero esta vez a raíz de varias denuncias por abuso sexual.

Dieciocho mujeres acusaron a Jean-Claude Arnault, esposo de Katarina Frostenson, una de los 18 miembros de la academia, y el escándalo obligó a suspender la premiación de este año. De profesión fotógrafo, Arnault nació en Marsella en 1946. Rebautizado recientemente como el “Harvey Weinstein de los Nobel”, cosechó influencias a partir de su mujer. Tras su casamiento, comenzó a rodearse con los principales referentes intelectuales de Suecia y la presencia de la pareja resultaba imprescindible para las celebraciones. De hecho, muchos lo consideraban como el miembro 19 de la Academia ya que por sus manos pasaban dinero y recursos del organismo. La confianza en él era tal que con los años fue nombrado Gestor del piso que la institución tiene en París. Además, solían subsidiar parte de las exposiciones, los eventos y conciertos que él organizaba en el Forum de Estocolmo, espacio cultural que fundó en 1989. “Era un poco como el salón del comité del Nobel. Era el lugar donde había que estar si se querías ser descubierto”, contó un escritor a la prensa sueca.

Sin embargo, eso cambió recientemente. Dieciocho mujeres, de las cuales no se sabe sus nombres, lo acusaron por abuso sexual. La primera denuncia se remonta a 1997 y otra de ellas involucra a la familia real sueca porque él le habría tocado las nalgas a Victoria, la princesa heredera al trono, cuando ella tenía veinte años. Según señalan las fuentes, un ayudante tuvo que separarlo y apartarlo de la joven para que no pasara a mayores.

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Dos para 2019. El escándalo no solo lo perjudica a él, quien se volvió un paria en Suecia, sino también a su mujer. Frostenson tuvo que renunciar a su puesto. Por fuera de eso, surgieron acusaciones que apuntan a que ellos también habrían filtrado nombres de ganadores de manera anticipada para arreglar apuestas que se realizaban sobre la premiación.

Por el momento la entrega del premio quedó suspendida. Es probable que en 2019 entreguen dos Nobel de Literatura. De todas formas, la Academia tiene otra preocupación porque su credibilidad quedó afectada a causa de Arnault. “Los miembros activos de la Academia sueca son plenamente conscientes de que la actual crisis de confianza impone grandes exigencias a un trabajo a largo plazo para recuperar la confianza del público”, dijo el secretario permanente interino de la Academia, Anders Olsson.