En el cierre de esta particular –y algo devaluada– Cumbre de las Américas, las primeras damas de países que concurrieron también tuvieron su finalización de agenda paralela. Un hecho que, de manera aleatoria, deja además un espacio y sobre todo un interrogante acerca de si ese rol no tendría que pasar por una revisión respecto de su relevancia para no parecer que, a veces, lo decorativo destaca más que las acciones que desde esa posición, algunas primeras damas realizan.
Por ahora, una de las que tomaron una acción concreta respecto de esto fue Beatriz Gutiérrez Müller, quien en 2018, tras la victoria electoral que en México tuvo su marido Andrés Manuel López Obrador declaró: “No seré primera dama de México”. Así se convirtió en la primera esposa en suprimir esa figura que en su país es protocolar, sin funciones ni responsabilidades concretas y, tradicionalmente, preside el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia, no sin responsabilidad en la gestión cotidiana en ese organismo. Por eso Müller delegó ese cargo al sector salud para que lo dirija una persona capacitada, y además, no aceptó ser siquiera presidente honoraria de ninguna otra institución pública federal, estatal o municipal.
En Argentina, en un rango menor al de primera dama, Soledad Quereilhac tomó una postura similar a Müller y se despegó del rol de “primera dama bonaerense” y también del cargo que viene adosado, el de titular de la Fundacion Banco Provincia. Incluso en un reportaje con PERFIL mencionó que era una figura que sería interesante debatirla sobre todo teniendo en cuenta los cambios que las mujeres vienen motorizando en otras áreas.
Cita con propósito. Mientras ese estudio o análisis está pendiente, en Los Ángeles, Fabiola Yañez fue quien invitó a Jill Biden a unirse a la Alianza de Cónyuges de jefes de Estado (ALMA),que desde hace un año preside Michelle Bolsonaro.
Y ayer por la mañana, en una actividad organizada por la anfitriona norteamericana ésta comunicó que aceptaba el convite. En esa reunión, a su turno, Yañez hizo el foco en el grooming, problemática en la que se encuentra trabajando junto a la ONG Grooming Argentina, la primera institución global en crear conciencia acerca de este delito a través de campañas e iniciativas de prevención y concientización. De hecho allí también estuvo Hernán Navarro –titular de dicha ong–, quien junto a Yáñez informó que Argentina es pionera en la penalización del grooming e instó a que todos los países instalen en la agenda pública esta problemática para así poder combatirla.
El grooming es, según explican desde esa ong, “la acción deliberada de un adulto, varón o mujer, de acosar sexualmente a una niña, niño, o adolescente, a través de un medio digital que permita la interacción entre dos o más personas como, por ejemplo, redes sociales, correo electrónico, mensajes de texto, sitios de chats, juegos en red, etc.” Además, Yañez informó sobre el proyecto que desde la Fundación Banco Nación –cargo honorario que tienen todas las primeras damas de Argentina–, apoya la creación de un software con inteligencia artificial para la detección temprana del cáncer de cuello uterino.
De este encuentro que se realizó en el Consulado General de Brasil en Los Ángeles participaron las primeras damas de Brasil, Colombia, Paraguay, Panamá, República Dominicana, Costa Rica, Ecuador–todas integrantes de ALMA–, Mellisa Santokhi-Seenacherry, primera dama de Surinam, y representantes de la Comunidad del Caribe y de Spouses of Caricom Leaders Action Network.