La gala de Boca se convirtió en una despedida de fans a Daniel Osvaldo

Por la zozobra y la tensión que siguieron a lo sucedido en el partido con River el jueves aquel en que las palabras “gas pimienta”adquirieron otra dimensión, se pensó en postergar esta cena anual. Y en el debate al respecto hubo firmes posturas encontradas. Finalmente con 1.700 invitados que habían comprado mesas por las que se pagaron 85 mil, 75 mil y 35 mil pesos, la balanza se inclinó por seguir el cronograma pautado y el viernes con la presencia de todo el plantel y también de figuras que formaron parte del club como Schiavi, Hrabina, Mouso, y McAllister, se realizó la cuarta gala para recaudar fondos para los 15 programas sociales que Boca realiza con el barrio y también celebrar los 110 años del club.
Si el cariño y la admiración expresado en incontables pedidos de selfies y autógrafos pudiera transformarse en moneda de cambio, esa noche Daniel Osvaldo no dudaría en definir de manera afirmativa una prolongación de su contrato con el club: de todo el plantel su mesa fue por lejos la más asediada por todos aquellos que tenían acceso al espacio del salón denominado Palco vip. El otro fue Fernando Gago, quien en un momento quedó atrapado entre una pasarela y su mesa rodeado de fans, mientras otros a dos metros se paraban a observar la escena conocedores de que la efusividad manifiesta de esa manera le eriza un poco la piel. Igual lo manejó de manera estoica. El resto de los jugadores cumplieron con la consigna e incluso se movieron de sus mesas para interactuar con los invitados.

En boca de... Pero fue en el escenario donde el presente del club se expuso en las palabras de Daniel Angelici quien señaló tres hechos como “raros” ya que no los consideró casualidades en el marco de tiempos de elecciones nacionales y del club propiamente dicho: el caso “gas pimienta”, una cuestión relacionada con el no mantenimiento de un tramo de vías que colindan con el club y la suspensión con orden de demolición de las obras de la ciudad deportiva que tenía previsto estrenar en junio en Ezeiza. Según explicó, después de ocho meses donde todo parecía en regla, el Estado descubrió que esas tierras eran fiscales. También informó que ya estaban firmadas las actas que definieron la expulsión –a efectivizarse en junio–  de todos los socios implicados en el hecho que dejó a Boca fuera de la Libertadores y que además habrá una querella por asociación ilícita contra ellos porque buscan ubicar a los autores intelectuales.
Aunque no se dijo de esta manera, en ese clima preeleccionario también puede situarse el premio que le dieron a Macri por ser el presidente más exitoso en la historia del club. Sin embargo, ubicado en el escenario, en su discurso no hubo alusión alguna a su proyecto político.

Récord. El resto de la noche se proyectó el trailer de la película Boca Juniors 3D, hubo sorteos y en sucesivas subastas a cargo de Julián Weich, Verónica Varano, Virginia Duré, Ileana Calabró y Juan Acosta se lograron récords como que alguien pagara 115 mil pesos por una camiseta argentina firmada por el papa Francisco, que tres cuadros de Milo Lockett terminaran en manos de Angelici luego de ofertar 200 mil pesos, 410 mil pesos por un auto, y 620 mil pesos por: un metegol que replica a escala la  Bombonera, camisetas de Boca y del Manchester firmadas por sus jugadores, ingreso a un entrenamiento y dos entradas en el palco presidencial. En total, con esta cena solidaria se recaudaron diez millones de pesos.