PROTAGONISTAS
el heredero de fiat

Lapo Elkann confesó que a los 13 años fue abusado en el colegio

Dandy. Lapo con su ex, Goga. Con ella estuvo en Punta del Este.
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“El soltero más codiciado de Italia llega a Punta del Este”,  titulaban los medios el verano pasado. Hasta entonces, Lapo Elkann, nieto del fundador de Fiat, Giovanni Agnelli, no era una cara conocida en la temporada esteña. Pero el robo que sufrió su entonces novia, lo convirtió en un personaje mediático aquel verano.
Esta semana, Lapo dio una entrevista a Il Fatto Quotidiano donde hizo una confesión que tuvo un efecto viral en las redes y en los medios europeos: dijo que siendo alumno de un colegio jesuita, fue abusado sexualmente. “Desde los 13 años viví cosas dolorosas que después me crearon grandes dificultades en la vida. Es el momento de decir la verdad: en el colegio, viví cosas horribles. Hablo de abusos físicos. Sexuales. Jamás había hablado antes de esto”, declaró el joven de 36 años. El tono intimista del reportaje fue fundamental y una de las encargadas de hacerlo fue Beatrice Borromeo, hermana de uno de los mejores amigos de Lapo y también novia de Pierre Casiraghi, uno de los hijos de Carolina de Mónaco.
A lo largo de la entrevista, Lapo relató que como era disléxico sus padres lo sacaron del colegio público al que asistía con sus hermanos y lo enviaron pupilo a uno jesuita: “Fui despachado. Lo viví como un verdadero castigo”, dijo. También recordó que uno de sus mejores compañeros de entonces “se suicidó hace año y medio y eso para mí fue un punto y aparte (...). Y tuve que trabajar mucho sobre mí mismo, ver también cosas que no quería ver. No esconderlas más, no esconderme. Tenía que ser honesto conmigo mismo y con los demás. Además cuando se suicida tu mejor amigo aparecen preguntas: ¿Pude haberme suicidado yo también? ¿Pude haber estado más cerca de él? Esto mismo me lo pregunté cuando se suicidó mi tío Eduardo”. Pero lejos de victimizarse, Lapo dijo que pudo capitalizar su dolor: “Jamás había hablado antes porque lo que quiero ahora es que esta historia sirva para algo. Pienso en, quizás, abrir una fundación; quiero ayudar a aquellos que han pasado por lo mismo que yo. Es justo hablar y también hacer algo positivo, útil”.