No es fácil para ella mantener contacto cotidiano con su familia. Es que desde que es reina de Holanda, los compromisos de Máxima Zorreguieta son muchos. Sin embargo, desde que ostenta la corona, nunca había venido tantas veces a la Argentina en un mismo año. En 2014, Máxima habrá visitado tres veces su país.
Su inminente aparición será para fin de año. Junto al rey Guillermo y sus tres hijas, las princesas Catharina Amalia, Alexia y Ariane, pasarán la Navidad en Argentina. Según la agenda oficial, llegarán unos días antes de Nochebuena, y el 21 de diciembre ya estarán instalados en Villa La Angostura, el lugar donde ya una vez pasó esas festividades.
La última vez que la familia real estuvo por aquí fue en la Navidad de 2012. El año pasado no vinieron debido a la entronización de Guillermo y Máxima como soberanos de los Países Bajos. En aquella oportunidad, ambos eligieron quedarse en su país y emitir el 25 de diciembre el primer mensaje de Navidad del nuevo rey. “La paz en la Tierra es más que un ideal inalcanzable. Más que una estrella en el cielo. La paz en la Tierra comienza en casa, en la calle, en el barrio, en el club, en nuestro propio pueblo o en nuestra propia ciudad”, dijo Guillermo.
Las últimas visitas de Máxima fueron (o intentaron ser) de incógnito. La primera ocurrió en septiembre último, para el cumpleaños de su madre, María del Carmen Cerruti. En esa oportunidad, la reina intentó que no se filtrara la información de su estadía, algo que finalmente no le fue posible. La última fue el mes pasado, para visitar a su padre, Jorge Zorreguieta, quien fue internado de urgencia en Fundaleu. En esa oportunidad, se había corrido el rumor de que el padre de la reina había muerto. “No sé de dónde salieron los rumores, pero mi padre está muy bien y estable, se encuentra recuperándose en la casa”, decía María Zorreguieta, hermana de Máxima, en la puerta del domicilio de la familia, en el barrio porteño de Recoleta.
El 20 de noviembre, Jorge Zorroguieta fue dado de alta y trasladado a su domicilio, donde ya se recupera. De hecho, tuvo una primera salida para ver un partido de polo junto a su mujer. El padre de Máxima no puede viajar a Holanda por un veto del Parlamento holandés que lo objeta por su pasado como secretario de Agricultura durante la dictadura argentina de Jorge Videla.