“Quiero agradecer por este premio que no considero una distinción individual sino para todo el equipo y aquellos que han aportado su tiempo y trabajo a lo largo de estos años”. Así, con humildad y reconociendo a quienes trabajan con él, Pedro Cahn, médico infectólogo y referente de la lucha contra el VIH/sida en la Argentina, recibió el Premio Perfil en el rubro Ciencia y Tecnología.
“Hemos intentado aportar nuestro granito de arena en la lucha contra el VIH/sida desde múltiples ángulos. Combatiendo contra la discriminación y el estigma, y eso ha sido posible gracias al trabajo y esfuerzo de todo el equipo”, sostuvo con su premio en mano frente a los invitados presentes en la cúpula del CCK. Con un tono seguro, el médico aseguró que existen conceptos con los cuales la sociedad debería estar de acuedo. “Educación, salud y ciencia deberían estar al margen de cualquier discusión política. Necesitamos tener un Ministerio de Salud, necesitamos tener un Ministerio de Ciencia y Tecnología y necesitamos que la educación sea reforzada porque ese es el camino hacia adelante”, expresó ante el aplauso cerrado del auditorio.
En 1989, Cahn fundó, junto con Kurt Frieder, la Fundación Huésped, una entidad de bien público y sin fines de lucro dedicada a la investigación, la asistencia y la prevención del VIH/sida. El médico infectólogo se convirtió en los últimos años en una de las voces más destacadas en el debate por la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo. Antes de recibir su estatuilla, habló con PERFIL y dejó algunas definiciones, entre ellas, sobre el aborto. “Nadie está a favor del aborto. La posición de nuestra Fundación Huésped, y la mía personal, es que los abortos existen a pesar de que uno no esté a favor de ellos. No te olvides de que la consigna de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito es “educación sexual para estar informado, anticoncepción para no embarazarse, aborto legal para no morir”. Si nosotros lográramos extender la enseñanza de la educación sexual en todas las provincias, cosa que no está sucediendo, evitaríamos embarazos adolescentes y no deseados. En la situación actual, oponerse a la legalización del aborto implica establecer una clara diferencia”, sostuvo.
Con respecto al VIH, aseveró que hoy han cambiando muchas cosas con respecto a esta enfermedad: “VIH, de ser una enfermedad uniformemente mortal donde el 99% de los pacientes termina muriéndose al cabo de cinco u ocho años de estar infectados, hoy tenemos una afección con la que se puede convivir en forma crónica, como si fuera diabetes o hipertensión”.