Cuando el miércoles el cronómetro marcó el minuto 64 se persignó, besó el césped y entró a la cancha como si fuese la primera vez. Aun teniendo cientos de partidos en su haber. Entonces la tribuna del Newcastle de Inglaterra estalló en ovaciones. Ni para él ni para sus seres queridos era un partido más. Sino el gran regreso a las canchas del “Galgo” Jonás Gutiérrez tras haberle ganado la batalla a un cáncer de testículo. En la tribuna del St. James Park su familia lloraba de la emoción. Y desde Argentina, su pareja, Alejandra Maglietti, también estuvo presente.
—¿Cómo lo viste después del partido?
—Estaba feliz porque volvió, por todo lo que significó para él. Y se emocionó mucho con el recibimiento que le hizo la hinchada.
—¿Viste el partido?
—Me pongo tan nerviosa que traté de no verlo. Soy muy ansiosa y sufro. Así que aproveché que tenía que ir a un curso y me fui antes de casa a un café a hacer tiempo. Y de paso evitaba verlo. Tenía miedo, y encima no entiendo nada. Pero cuando la mamá de él me mandó un mensaje que decía “Ya entró” no aguanté y corrí al lugar donde tenía estacionado el auto y les pedí a los empleados de ahí que me pusieran el partido. Nos emocionamos todos. Lo vi correr como siempre, como antes de todo esto. Increíble. Verlo tan bien me hace feliz. Y su felicidad es la mía.
—¿Y antes del partido pudiste hablar con él?
—Hablamos al mediodía, y la verdad es que él es tan tranquilo que no lo noté nervioso. Ni me lo dijo.
—¿Se imaginaba este regreso?
—Sí, aunque quizás no tan pronto. Le detectaron el cáncer en octubre de 2013, en noviembre lo operaron acá en Argentina y volvió a Inglaterra enseguida a jugar. Y en un control en junio de 2014 le detectaron una remisión. Entonces empezó con la quimioterapia. Se la hizo, en diciembre volvió a entrenar, ¡y ya está jugando de nuevo!
—¿Cómo te llevás con su familia?
—Conocí a sus papás (Mónica y Ricardo) en un momento muy raro porque él se estaba haciendo la quimioterapia. Yo fui a visitarlo a su casa de Devoto y su mamá fue porque me quería conocer. Y la verdad es que fue muy amorosa conmigo, estaba muy contenta y me decía que quería casar al hijo. Típico de todas las mamás. Y la relación se fue intensificando porque yo me quedaba mucho allá.
—¿Cuando lo conociste Jonás comenzaba su tratamiento?
—Lo conocí un poco antes y un día vino triste y me dijo que los estudios le habían dado mal, que tenía una remisión. Y hubo que empezar la quimioterapia. Fue justo cuando estábamos empezando lo nuestro. Fue muy duro para él.
—¿Más que lo que vivió con la operación?
—Por supuesto. Para la operación entró y salió del quirófano. Y enseguida retomó su actividad y su vida en Inglaterra. Pero con la quimio sufrió un gran cambio físico y anímico. Estuvo muy débil, eso lo asustó.
—¿Vos también te asustaste?
—Su enfermedad nos unió mucho más. Y aprendí muchas cosas estando a su lado. Yo también pasé momentos difíciles sin saber qué hacer, sin entender lo que pasaba. Me acuerdo de estar noches enteras googleando qué era la quimioterapia, por ejemplo; de hablar con amigas que habían tenido un familiar pasando por lo mismo... Imaginate que ahora para mí verlo así es una gran emoción.
—¿Y vos seguiste eligiendo quedarte con él?
—Ese día que conocí a su mamá, ella me dijo: “Es muy dulce y buena persona, vas a ver, ya lo vas a conocer”. Y fue así. Es tan buena persona que es imposible querer irse de su lado.
—¿Es cierto que se van a casar?
—El me lo propuso y dije que sí. Pero queremos darnos tiempo para ser novios y conocernos más. Yo soy muy relajada con eso. El es más sentimental y romántico. Creo que cuando todo vuelva a su cauce seguro ponemos fecha.
El apoyo de sus compañeros
El retorno del volante a la Premier League generó la alegría de muchos de sus compañeros. El primero en felicitarlo fue Lionel Messi, quien desde su cuenta de Facebook subió una foto del jugador en acción y escribió: “¡Qué bueno verte de nuevo en las canchas, Jonás!”.
Su compañero del Newcastle Eduaro Toto Salvio escribió en Twitter: “Estoy muy feliz por la vuelta del Galgo a las canchas, sos grandísimo”. Y su competidor, el arquero del Manchester United, David de Gea, escribió: “La otra gran alegría de la noche fue verlo al Galgo jugando. Qué alegría verte en el campo crack”. Ademas, Jonás reconoció que se sorprendió con el gesto de su amigo Fabricio Coloccini, quien le entregó la cinta de capitán apenas entró a la cancha. “Fue un gesto del Colo, que es parte de mi familia prácticamente por la gran relación que tenemos”, dijo.
