Fue una fiesta de esas que quedan en el recuerdo por estar perfectamente organizada. Es que Ana Laura Morales, además de ser una de las hijas de Víctor Hugo, es también una de las wedding planners más conocidas de Latinoamérica. Y allí estuvo el relator y periodista para acompañar a su hija, quien el pasado 13 de febrero se casó con su novio, Santiago Laborde.
El casamiento se llevó a cabo en la iglesia San Juan Bautista. Pasadas las 17, la novia ingresó del brazo de Víctor Hugo.
La sorpresa de la tarde la dio el padre Henry, quien les comunicó a los novios que había llegado desde Roma un documento sellado y firmado desde el Vaticano por el Papa. Fue un emotivo mensaje para los novios con la bendición de Francisco. La pareja estuvo vestida a la altura de las circunstancias: la novia lució un vestido exclusivo de la diseñadora española Rosa Clará, y el novio, un traje de Calvin Klein. El festejo fue en el Hotel Sofitel Carrasco, adonde asistieron 120 invitados, según consignó el diario uruguayo El País. Luego de un show de fuegos artificiales en la terraza, los invitados ingresaron al salón, que fue ambientando por el argentino Martín Roig. Ana Laura convocó a wedding planners de todo el mundo en calidad de invitados. “Todos estaban maravillados con el estilo y la ambientación”, contó Roig a PERFIL, quien llevó un equipo de floristas que a su vez se encargó de dirigir a reconocidos floristas de otros países de Latinoamérica.
Luego de la cena, la agrupación Los Fatales animó la fiesta, que siguió más tarde con temas clásicos de películas y canciones favoritas de los recién casados. También hizo un set musical Zeta Katzman, una cantante de jazz argentina.
Según trascendió, la luna de miel será en Asia y Europa del Este en los próximos meses.
A dos orillas. Víctor Hugo tiene cinco hijos. A Paula, Matías y Camila los tuvo con su esposa Beatriz, con quien vive en Buenos Aires. Y a los otros dos, Ana Laura y Diego, con una primera pareja que el conductor tuvo a los 20 años. Se desconoce completamente el nombre de esta mujer, que no estuvo invitada a la fiesta. “No tienen mucha relación. En el entorno de Víctor Hugo todos lo saben pero nadie pregunta”, contó a PERFIL un invitado de la boda. “Es como si Víctor Hugo tuviera dos vidas: una que hizo de joven con su primera pareja, y la otra, con la esposa que todos conocen”, contó otra persona que solía compartir partidos de fútbol en Uruguay junto al relator.
Ana Laura, al igual que su padre, comenzó siendo periodista. Sin embargo, su desempeño como wedding planner es su mayor pasión. Hoy dirige el Instituto Inibep, que tiene oficinas en varios países de América Latina y Europa. Su última aparición en los medios fue en televisión, en el ciclo Hola vecinos. “Siento que hice todo lo que quería hacer en TV. Aprendí de todo. Trabajé 18 años en pantalla, pero esto me hace muy feliz y me da mucha plata”, confesó ella con respecto a su rol de empresaria.
Actualmente, Ana Laura está abocada a su empresa impartiendo cursos, seminarios y conferencias sobre el negocio de organización de eventos en México, Colombia, Panamá, Ecuador, Chile, Brasil, Perú, Argentina, España y Canadá.
En las entrevistas, Ana Laura muestra adoración por su papá: “Todo lo que hace, lo hace detrás de un ideal (...) Los enfrentamientos que él tiene desde el punto de vista político con el Grupo Clarín no son de ahora; vienen desde hace treinta años”. Cuando le preguntaron por las virtudes, aseveró: “Es muy generoso, paciente, sabe escuchar y me presta atención cuando la necesito”.