Las fiestas de fin de año suelen traer dolores de cabeza... y de estómago. Mucha comida, muchos brindis, muchas calorías. Y la diversión de una noche puede convertirse al día siguiente en un fastidio. ¿Cómo reponerse el día después? Perfil.com consultó con la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN), que nos dio algunos consejos:
- No incurrir en abusos. Es la primera recomendación que dio el doctor Edgardo Ridner, presidente de la SAN. Y explica: "Si sabemos que la consecuencia puede ser desagradable, significa que no estamos disfrutando de la fiesta. En medicina es importante prevenir, no sólo curar, por eso es importante escuchar la voz del cuerpo, y evitar los abusos".
- Combinar comidas calóricas con vegetales. "Es decir, es preferible comer un pavo o lechón con ensalada que con papas", explica Ridner. Y asegura que es necesario encontrar la "propia moderación".
- No preparar comidas en exceso. "Si sabemos que serán cuatro los comensales, no hacer dos pollos, porque claramente va a sobrar y van a seguir comiendo lo mismo al día siguiente", señala el médico. Es que, según dice, se trata también de una cuestión "ética", además de un tema de salud.
- No excederse con las bebidas alcohólicas.
- Al día siguiente hay que compensar las calorías de la noche previa con frutas y verduras. Es decir, hay que "evitar alimentos con concentración de energía, como carnes y cereales, porque no sería una buena compensación con los alimentos calóricos de la noche anterior. Los vegetales y frutas ayudar al bienestar digestivo, porque tienen pocas calorías y muchos líquidos".
- Beber agua y jugos de frutas, y evitar las bebidas con mucha azúcar.
- Hacer ejercicios. "Salir a caminar o hacer ejercicios es recomedable siempre, no sólo después de las fiestas. Son un buen complemento, pero no va a quitarnos del todo los pecados del día anterior", ironiza el especialista en nutrición.
Sin embargo, Ridner vuelve a hacer hincapié en la importancia de la prevención. Y explica que no todas las personas tienen la misma forma de comer y digerir las comidas. "Cada una tiene su propia conformación, y es necesario que cada una se autocontrole y evite comerse todo hasta reventar. Es una cuestión de actitud, de saber comer y beber con moderación, para poder seguir disfrutando de la fiesta", señala presidente de la SAN.