SALUD

Crean un dispositivo económico para medir las apneas de sueño

Afecta a un 4% de la población, pero su diagnóstico es caro.

default
default | Cedoc

Las apneas de sueño –también llamadas “paradas respiratorias” y “ronquidos”- afectan a un 4 por ciento de la población argentina, y puede llegar hasta el 24 por ciento a medida que aumentamos en edad. Estos datos ya fueron investigados, sin embargo muchas personas no saben que tienen la enfermedad o no pueden hacerse el estudio para detectarla porque es muy caro.

Es por eso que investigadores de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), en conjunto con integrantes de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) y el CONICET crearon un sistema barato y fácil de usar que permite estimar la cantidad de apneas por horas de sueño que tiene una persona, midiendo una sola señal.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

“Los aparatos tradicionales con los que se hace el estudio –se llaman polisomnógrafos, pueden estar en laboratorios de sueño y los pacientes tienen que dormir ahí, o la otra forma es que se los lleven a la casa- toman más de 10 registros distintos por medio de cánulas en la nariz, eléctrodos, fajas, etc. Esto resulta incómodo para dormir, se puede desconectar un eléctrodo y dificultar el estudio. Las señales y los resultados los tiene que interpretar un experto del laboratorio”, explica Diego Milone, profesor de Ingeniería Informática en la UNL y uno de los investigadores del proyecto. “Además, estos aparatos son escasos en Latinoamérica –incluido en la Argentina- y de alto costo para los laboratorios, rondan los 15 a los 30 mil dólares más la infraestructura necesaria y capacitación de técnicos y profesionales”, agrega el doctor Luis Larrateguy, experto en Medicina Respiratoria y del Sueño y otro integrante del proyecto.

En éste sentido, la investigación -que comenzó en el 2009 y que fue financiada por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCyT) y la empresa CardioCom- se propuso como una alternativa diferente a otros métodos de detección de las apneas de sueño.

“Nuestra idea es simplificar al máximo la cantidad de cables que se tiene que poner el paciente, registramos una sola señal. De esta forma, el médico le da el aparato al paciente para que se lo lleve a la casa, él mismo se lo puede colocar y sólo lo necesita una noche. El pequeño equipo de medición no perturba en lo más mínimo el sueño y el paciente ni se da cuenta de que lo tiene”, revela Milone.

Larrateguy añade que, "cuando el paciente vuelve a ver al médico, éste conecta el aparato a la computadora y un programa, que es la otra innovación del proyecto, da como resultado la cantidad estimativa de las apneas que tuvo el paciente”.

Para la investigación, Larrateguy aportó una base de datos de 3000 pacientes que se hicieron los estudios de sueño con polisomnógrafos, de los que se utilizó una sola señal para validar el programa de detección. Sólo falta que el nuevo equipo sea probado en personas.

 El número que proporciona el aparato es muy fácil de explicar: los pacientes que durante la noche tengan entre 5 y 15 paradas respiratorias por hora de sueño, resultan casos de apnea leve; entre 15 a 30 casos moderados y más de 30, graves.

“Lo que buscamos es democratizar el diagnóstico, hacerlo más accesible a la población”, enfatiza Larrateguy, quien aclara que los pacientes “sólo pagarían un estudio de menor costo”, mientras que los médicos o los laboratorios que adquieran el equipo “lo harían a un precio sensiblemente inferior al de los equipos que se pueden comprar actualmente”.

Apneas. Tanto el Consenso Argentino de Sueño como el Español, consideran al Síndrome de Apneas de Sueño como un cuadro de somnolencia excesiva, ronquidos y apneas, que conllevan a trastornos cognitivo-conductuales, respiratorios, cardíacos, metabólicos e inflamatorios.

“A la persona, cuando duerme, se le va la lengua hacia atrás y sufre un colapso de la faringe, lo que impide el paso de aire. Como consecuencia de la pausa respiratoria durante el sueño, se produce un micro despertar, lo que provoca una fragmentación del sueño. Las estructuras que estaban colapsadas vibran. Ése es el ronquido, uno de los síntomas principales de éste síndrome”, señala Larrateguy.

* Especial para Perfil.com