Washington (AFP) - Las personas que sueñan con encontrar la fuente de la juventud en una inyección, ahora tienen nuevas opciones, con un nuevo relleno dérmico facial.
Dentro de la ola de procedimientos cosméticos destinados a alcanzar un rostro más juvenil, un relleno inyectable llegó al mercado con la oferta de hacer para la parte inferior de la cara lo que el Botox hace en la parte superior.
El fabricante del Botox, el laboratorio Allergan de California, lanzó este mes en Estados Unidos el nuevo relleno dérmico llamado Juvederm, para competir con Restylane, un producto sueco que comercializa desde 2004 Medicis y que ofrece suavizar las arrugas alrededor de la nariz y la boca. De esta manera, espera explotar el lucrativo sector del mercado de los rellenos dérmicos, que se estimó en 442 millones de dólares en 2005, según un estudio citado por Allergan.
Una gran parte de ese monto se destina a los llamados procedimientos inyectables o no quirúrgicos. Los estadounidenses gastaron 12.400 millones de dólares durante 2005 en procedimientos cosméticos, 8.200 millones en aquellos que requirieron quirófano y 4.200 no quirúrgicos, según la Sociedad Estadounidense de Cirugía Plástica Estética (ASAPS, por sus siglas en inglés).
"En los últimos años, 80% (de los procedimientos cosméticos) han sido no quirúrgicos", indicó Lawrence Reed, cirujano plástico y profesor asistente en el Hospital Presbiteriano de Nueva York. "Es una manera importante de lidiar con esa parte del proceso de envejecimiento. Son procedimientos cortos, con mínimo tiempo de reposo". Aunque los rellenos y el Botox no siempre producen los resultados drásticos de las cirugías, "hay personas que consiguen una expresión lo suficientemente buena como para no necesitar cirugía", dijo Reed.
Además, destacó que Juvederm y Restylane sirven "para rellenar huecos" y pueden ser complementarios del Botox, que remueve las arrugas al relajar músculos.
Restylane se vende en 70 países, de acuerdo a su fabricante, el sueco Q-Med. Juvederm fue desarrollado por los laboratorios franceses Corneal -comprado por Allergan en noviembre- y es vendido en los diferentes países bajo diversos nombres.
Los pacientes generalmente pagan 527 dólares por este procedimiento de relleno dérmico, según la ASAPS, en comparación con los 382 dólares que cuesta el Botox.
Para tener mejores resultados, las inyecciones deben repetirse luego de 4 meses a un año. A diferencia del Botox, que es una neurotoxina derivada del botulismo que relaja los músculos faciales cercanos a las líneas del entrecejo y la frente, los rellenos dérmicos están hechos a base de un ácido natural que añade volumen y humedece para aliviar las arrugas y los pliegues. Robert Grant, presidente de Allergan Medical, dijo que el nuevo producto puede ser combinado con tratamientos de Botox para lograr lo que la compañía llama "rejuvenecimiento facial total".
"Hace quince años lo único que teníamos era el colágeno, y eso se sentía como una roca en la piel", señaló la dermatóloga cosmética de Los Angeles Jessica Wu, que también es asesora de Allergan. "Ahora tenemos correctores de arrugas que se funden en tu piel y nadie puede notar que te inyectaste algo".
Eva Lowry, habitante de 43 años de St. Augustine, Florida, dijo estar satisfecha con los resultados de Juvederm y el Botox, el primer procedimiento de esta naturaleza que probó.
"Yo realizo bastante entrenamiento físico, pero comencé a sentir que mi cara no se veía tan joven como mi cuerpo", señaló en una entrevista telefónica.
"Cuando volví a trabajar, la gente me decía que parecía 10 años más joven", apuntó.
Allergan amplió su base de productos e incorporó los derechos de Juvederm para Estados Unidos en 2006, al comprar Inamed Corp., sobreponiéndose a una oferta rival de Medicis. La estadounidense Administración de Drogas y Alimentos aprobó Juvederm en junio. Pero Medicis podría estar lista para lanzar un contraataque, y su presidente, Jonah Shacknai, dijo a la AFP que no hay preocupación en la empresa.
"Como siempre, esperamos competencia", destacó. Mediante un acuerdo con la europea Ipsen, Medicis se apresta a iniciar la venta en Estados Unidos, Canadá y Japón de un rival del Botox llamado Reloxin. El nuevo producto se ha vendido exitosamente fuera del mercado estadounidense y "pensamos que competirá extraordinariamente bien" contra el Botox, agregó.