Washington - Las personas físicamente activas durante sus momentos de ocio parecen10 años más jóvenes biológicamente que aquellas que son sedentarias, según un trabajo de científicos británicos publicado en Estados Unidos.
Estos investigadores del King's College de Londres estudiaron a 2.401 gemelos hombres y mujeres a los que sometieron a cuestionarios sobre su nivel de actividad física, su estatus socioeconómico y sobre si fumaban. También analizaron muestras de ADN de cada uno para estudiar la longitud de los telómeros en sus glóbulos blancos, que forman el sistema inmunológico.
Especie de marcadores de la edad biológica, los telómeros -elementos situados en los extremos de los cromosomas- se acortan un poco con cada replicación de los cromosomas durante el ciclo celular de la vida, hasta alcanzar una longitud demasiado corta, provocando el envejecimiento de la célula. Se estima que la longitud de los telómeros se reduce cada año en promedio en 21 nucleótidos o unidades estructurales.
En el grupo de los gemelos estudiados, los menos activos físicamente en su tiempo libre tenían telómeros más cortos que los que realizaban regularmente ejercicio durante sus periodos de ocio, constataron estos médicos, cuyo estudio es divulgado en los Archives of Internal Medicine, publicación del Journal of the American Medical Association (JAMA).
"La diferencia media en la longitud de los telómeros leucocitarios entre los más activos del grupo (199 minutos de ejercicio por semana en promedio) y los más sedentarios (16 minutos de actividad física semanal) era de 200 neucleótidos", subrayó la doctora Lynn Cherkas, principal autora del estudio. En otras palabras, "las personas más activas tenían telómeros de una longitud comparable a la de las personas sedentarias diez años más jóvenes", añadió.
La actividad física podría disminuir el estrés psicológico y en consecuencia sus efectos sobre los telómeros y el proceso de envejecimiento, estimaron.
Fuente: AFP