El intento de robo que involucró a los custodios de Florencia Kirchner, hija de la presidenta Cristina Fernández y el ex presidente Néstor Kirchner, fue calificado por el ministro de Justicia y Seguridad, Aníbal Fernández, como "un hecho común" y prefirió no dar detalles en torno a los 40 disparos que se gatillaron en el confuso episodio.
"Es un hecho común, y no voy a dar más explicaciones porque estamos en plena investigación y cuando tengamos la información suficiente la daremos a conocer", indicó Fernández, en declaraciones efectuadas al canal América 24, en el programa "Luisa Valmaggia pregunta".
La noche del sábado, los custodios de la hija de la presidenta resistieron a los tiros el robo del automóvil desde el que aguardaban que la joven saliera de una casa en la que permanecía junto a unos amigos, en el partido bonaerense de Vicente López.
Fuentes policiales reportaron a la agencia de noticias DyN que el personal de seguridad detuvo a dos de los asaltantes, uno de los cuales sufrió dos heridas de bala, mientras que otros dos delincuentes huyeron.