Los vecinos y frentistas de la avenida Cabildo, en el tramo que va desde la General Paz hasta Congreso, deberán acostumbrarse al agudizado ruido de los colectivos y las bocinas. Es que la circulación en la avenida está afectada por obras que comenzaron el sábado 8 de marzo pasado y que se extenderán hasta fin de año. Los trabajos corresponden tanto al servicio de subtes como al futuro sistema de Metrobus que correrá por esa avenida.
La primera serie de obras corresponde a la prolongación de las cocheras de la estación Congreso de Tucumán de la línea D del subte. Por ahora el tramo afectado sobre la avenida es la mano en sentido hacia Provincia, entre la calles Iberá y Manuela Pedraza. Otro obrador dedicado a los mismos trabajos también dificulta la circulación en el cruce con la calle Comodoro Rivadavia.
A modo de reducir los trastornos y evitar la zona, desde la Subsecretaría de Tránsito y Transporte porteña recomiendan a quienes se dirijan hacia Vicente López, tomar Congreso, Vuelta de Obligado, Juana Azurduy y nuevamente la avenida Cabildo.
Desde la empresa estatal Sbase, explicaron que la ampliación de las cocheras para las formaciones va a agilizar el estacionamiento y la reparación de los trenes.
El enojo y fastidio de los vecinos acompañan las tareas. Caos vehicular, paradas de colectivos corridas de cuadras y calles valladas forman parte de la nueva postal urbana que se montó en esos 400 metros de una de las principales avenidas de la Ciudad que comunica con la zona Norte del Gran Buenos Aires.
Los vallados se colocaron hace unos 15 días y tomaron de sorpresa a vecinos y comerciantes del lugar. “Los instalaron sin aviso previo y sin importarles cómo nos afectarían”, se quejó Rubén Martínez, en la puerta de su mueblería en Cabildo al 3100. “La gente no tiene por dónde cruzar y por esta vereda no pasa nadie. Con las obras anteriores estuve dos años con la valla frente a la puerta del local, nos están fundiendo de a poco”, agregó resignado el comerciante, en la zona desde el año 1995. Para Mario Fernández, encargado de una ferretería al 3500, “hace menos de un año construyeron estas plazoletas y ya las tienen que destruir para que pasen los colectivos. Una locura”, reclamó.
Desde fines de mayo o principios de junio, Cabildo lucirá aún peor. Según estiman desde el Gobierno porteño, para esa fecha comenzarán en la parte central de la avenida los trabajos del Metrobus que conectará Puente Saavedra y la estación Congreso de la línea D del subte.
Serán aproximadamente siete meses de convivencia con los atascamientos vehiculares, obradores, polvo, ruido y construcción de estaciones. El corredor Cabildo albergará a diez líneas de colectivos y beneficiará a 175 mil pasajeros en una zona donde transitan 240 servicios por hora.
De los ocho carriles actuales que tiene la avenida, cuatro quedarán destinados a la circulación exclusiva del transporte público y dos para tránsito pasante a ambos lados del corredor.