Julio "Uruguayo" Rosales, el imputado por el secuestro del joven Ariel Perretta que se entregó a la Justicia en las últimas horas, admitió hoy que "facilitó el lugar" para que estuviera alojado el muchacho durante su cautiverio y trató de despegar del hecho a varios de sus familiares, también arrestados.
Así lo reveló su abogado, José España, al hablar con la prensa cuando su cliente -quien mediante un pacto con la Justicia se entregó en un shopping de la ciudad bonaerense de Avellaneda-, fue llevado a declarar a la Fiscalía federal de Morón, en el oeste del Gran Buenos Aires.
Con Rosales son cuatro las personas que están detenidas por el hecho, todas con relación familiar entre sí. Los otros arrestados son Miguel Muñoz (22), su novia Jéssica Rosales (18), hija del "Uruguayo", y Gabriela Susana Ruiz (36), madre de la joven y concubina de Julio Rosales.
Según España, el imputado "aclaró su situación y manifestó todo cuando conocia de este hecho", resaltando a la vez la "absoluta inocencia de su mujer, su hija y su yerno".
En ese sentido, tal como lo hizo antes de comenzar la declaración, el letrado sostuvo que su cliente admitió que "facilitó, proporcionó el lugar para que el chico esté secuestrado", y que "no conoce a otros detenidos" que están sospechados por el hecho, como un manager bailantero del Gran Buenos Aires.
El letrado se escudó en el secreto de sumario para no dar detalles de la declaración de Rosales, pero aseguró que "dio absoluta precisión de todos los detalles que él conocía del hecho". España afirmó además que no pidió ninguna medida especial de protección para su pupilo.
También señaló el abogado -en este caso antes de la audiencia de hoy- que el sospechoso aclaró que la facilitación de la vivienda fue el único papel que le cupo pues "por la forma de organización (de estas bandas) hay células en las que cada una cumple un determinado rol".
Los parientes de Rosales (Gabriela Ruiz, Jéssica Rosales y Miguel Muñoz) habían sido llevados ante la Justicia anteayer y el único que declaró en la audiencia fue el hombre, aunque los tres clamaron inocencia. Muñoz, según trascendió, habría señalado como uno de los presuntos responsables del secuestro a su virtual suegro.
Con respecto a las mujeres, España, quien también las patrocina, había dicho que su versión es "que ellas desconocían la situación".
"Para eso -continuó- hay que graficar bien como era el lugar, se trata de un predio con tres casas independientes entre sí, sólo hay un pasillo que comunica a la calle. Ellas estaban en la vivienda de adelante y no sabían lo que pasaba en el fondo, donde estaba este chico secuestrado".
El abogado había aclarado además que Ruiz está separada de Rosales y "entre ellos hay una muy mala relación". En la casa vivían Ruiz con un hijo menor de edad y su hija Jéssica -quien a su vez tiene dos hijas, una de tres años y otra de dos meses- y con la pareja de ésta, Miguel Muñoz.
Fuente: DyN.
