“Yo le quiero sugerir unos pequeños cambios”, dice con una sonrisa el peluquero de 34 años. “Recortarle un poco el largo, oscurecerle un poco el tono, quizás unos reflejos. Algo más acorde con la exposición mediática que está teniendo. Vamos a ver si lo puedo convencer”.
Juan Manuel Zamora es el dueño del salón de peluquería Uomma Class, en Haedo, y desde hace cuatro años tiene a su cuidado las originales mechas del sindicalista ferroviario Rubén “Pollo” Sobrero.
“La primera vez que vino me pidió que le mantuviera el color. Con el tiempo se lo fui cambiando un poquito, apagando apenas ese oxigenado tan fuerte, pero no mucho; es su marca registrada".
Y agrega: "Él fue un pionero en resaltar su imagen en el sindicalismo; con el pelo oscuro y corto, no sería el Pollo. Es lo que pasa con las personalidades públicas: se va creando un personaje y se trabaja sobre lo mismo, mejorándolo".
Zamora trabajó en cine, publicidad, televisión y desfiles; fue parte del staff de peluqueros de la producción de Sábado Bus y también de Canal 13.
Cuidó del look de la cabeza del cantante Axel durante un tramo de su carrera, entre otras figuras. “Es desde ese lado que le quiero plantear un pequeño cambio al Pollo, para que su pelo no se vea tan seco, tan quebradizo.
Ahora que es más conocido, como líder tiene que tomar conciencia y cuidar su imagen. Se tiene que ir reafirmando sin perder su esencia”, explica.
Como todos los peluqueros, Zamora ha recibido confidencias de Sobrero, que lo visita cada “mes, mes y medio” para actualizarse el color. “Él me cuenta de sus cosas personales, y yo de las mías. Somos amigos, cada tanto tomamos café, hemos ido a comer juntos y yo hice un programa en la radio de los ferroviarios, FRS, donde él está casi siempre. Pero nunca me habla de trabajo”, cuenta.
Por eso, se sorprendió mucho cuando vio por televisión que lo llevaban preso: “No lo veo con un perfil agresivo, como de mandar a hacer algo así de los vagones de la línea Sarmiento). Y lo conozco bastante… él
anda tranquilo acá por el barrio, todo el mundo lo quiere, sobre todo en los trenes”.
Sobrero tiene tanta confianza con Zamora que hasta ha puesto en sus manos la cabeza de su hija Evelyn, de 15 años, y el pelo “precioso, castaño, manecer varios días en prisión fue: “¡Cómo tendrá las raíces!”.
El estilista incluso tuvo el honor de prepararla para su fiesta de 15. Eso sí, el ferroviario, como buen papá de chicas, la acompaña a la peluquería y la pasa a buscar en persona.
Ahora, en su salón, suspira: “Es que estaba por venir a verme, y justo lo llevaron detenido… Recién volvió en estos días, para avisar que iba a pasar. Lo estoy esperando. Voy a tratar de convencerlo de que se haga algún baño de crema, para que se vea más saludable su pelo.
Lo primero que pensó el “hombre manos de tijera” de Haedo cuando vio que el Pollo iba a perdarle algunos tratamientos capilares nuevos para fortalecer lo que tiene. Hasta ahora, le tapamos las entradas con un flequillo. Y… una vez que el pelo se cae, se cae”, sentencia.
La peluquería queda en Juan B. Justo al 500, a tres cuadras de las vías de Haedo. El estilista sigue pensando en cómo mejorar la imagen de Sobrero, el sindicalista ferroviario que es casi, casi un metrosexual.
Fuente: Diario Libre