El Palacio de Tribunales amaneció rodeado por policías apostados detrás de pesadas vallas metálicas. Es que este mediodía, con casi dos horas de retraso, comenzó el juicio oral y público por la peor tragedia de la historia argentina por causas no naturales, las 194 muertes ocurridas en la discoteca República Cromañón.
En el banquillo de los acusados se acomodó Omar Chabán, completamente rapado, flanqueado por los músicos de Callejeros, encabezados por Patricio "Pato" Fontanet. Separados por un grueso tabique de vidrio blindado se ubicaron los familiares de las víctimas, que ocuparon todos los lugares de la sala de audiencias en la que hace 23 años fueron condenados los jerarcas de la última dictadura y exhibieron las fotografías de las 194 víctimas mortales de la tragedia.
Las miradas del público y la prensa se depositaron sobre la figura de Chabán, quien, con campera celeste, ingresó a Tribunales a las 9.30 por la calle Tucumán –un lugar no previsto para los imputados- y lució su cabeza rapada con algunos atisbos de cabellos canosos, serio, circunspecto y restregándose el rostro con las manos constantemente. Su mirada aparecía esquiva y en ningún momento giró la cabeza hacia el sector en el que estaba ubicado el público, ni hacia los laterales, donde estaba la prensa.
A su izquierda, a unos cuatro metros, Fontanet aparecía sumergido entre dos de sus compañeros de Callejeros; las restricciones con que debió trabajar la prensa impidieron observar un contacto entre ambos.
La primera jornada, que comenzó exactamente a las 11.52, insumirá la lectura de los requerimientos a juicio de los cuatro cabezas de querella: José Iglesias, María del Carmen Verdú, Patricio Poplavsky y Mauricio Castro, abogados de cada uno de esos cuatro grupos en que quedaron reunidos los reclamos de los deudos de los 194 muertos.
El tribunal dispondrá luego un cuarto intermedio y por la tarde está prevista la lectura del requerimiento de elevación a juicio firmado por el fiscal de instrucción Juan Manuel Sansone, actualmente de licencia psiquiátrica afectado emocionalmente por la compleja y dolorosa tramitación de la causa.
El juicio buscará esclarecer qué ocurrió la fatídica noche del 30 de diciembre de 2004, cuando antes de la medianoche una bengala lanzada por un espectador incendió los paneles acústicos del techo, recubiertos por una red "media sombra", liberando gases de cianuro que segaron casi 200 vidas y alteraron para siempre varios miles más.
Pero el Tribunal Oral en lo Criminal número 24, integrado por los jueces Daniel Llanos, Cecilia Maiza y Marcelo Alvero, con la intervención del fiscal Jorge López Lecube, tratará de determinar por qué ocurrió, descorriendo para ello una compleja trama que derivó en la habilitación de un lugar, que nunca debió haberse realizado.
Chabán está acusado de " estrago doloso seguido de muerte y cohecho activo", figuras que sumadas podrían derivar en una condena de hasta 20 años de cárcel, en caso de que fuera hallado culpable. Junto con él también comparecerán su ex colaborador Raúl Villarreal y los integrantes del grupo de rock "Callejeros", que comenzó a tocar aquella noche, pero interrumpió el concierto cuando estalló la tragedia.
La cabeza visible del grupo es su líder, Patricio Santos "Pato" Fontanet, pero también comparecerán el manager, Diego Argañaraz y los músicos Juan Alberto Carbone, Maximiliano Djerfy, Eduardo Vázquez, Christián Torrejón, Daniel Cardell y Elio Delgado. Ellos, al igual que Chabán y Villarreal, afrontan cargos por "estrago doloso seguido de muerte y cohecho activo".
También estarán en el banquillo de los acusados los policías Carlos Rubén Díaz y Miguel Angel Belay, acusados de incumplimiento de los deberes de funcionario público y cohecho pasivo.
Finalmente, afrontarán el juicio oral los ex funcionarios del gobierno porteño -que encabezaba Aníbal Ibarra- Fabiana Gabriela Fiszbin, ex secretaria de Gestión y Control; Gustavo Juan Torres y Ana María Fernández, todos por incumplimiento de los deberes de funcionario público.
El gran ausente será el principal responsable de la tragedia: la Justicia no logró ubicar, luego de tres años y medio de investigación, a quien arrojó la bengala que inició el incendio. Tampoco estará, ni en éste ni en ningún otro juicio vinculado con Cromañón, el ex jefe de gobierno porteño Aníbal Ibarra, ya que fue sobreseído en todas las instancias por las que atravesaron las acusaciones de la fiscalía y los familiares de las víctimas.
Fuente: DyN