En las últimas décadas, la Patagonia sufrió distintos azotes por parte de las erupciones volcánicas. Las localidades de San Martín de los Andes, Bariloche, Junín de los Andes y Villa La Angostura ayer comenzaron a limpiar las calles, veredas y rutas para recuperar la normalidad de cada ciudad. Pese a ello, permanecían en estado de alerta ante el pronóstico de un tercer estallido del Calbuco.
Con el objeto de reactivar el servicio lo antes posible, en el aeropuerto de Bariloche también se iniciaron las tareas de limpieza. Colaboró, además, que ayer hubo una disminución de la caída del material volcánico, que favoreció la situación.
“Salió el sol y no cayó más ceniza. Sólo se percibe polvillo en suspensión, producto del paso de vehículos que la levantan. La cantidad acumulada en calles y avenidas no superó los cinco centímetros”, aseguró al respecto el teniente coronel Horacio Luis Ramón Alonso, responsable del operativo de emergencia en las zonas afectadas. Según explicó, se trata de una ceniza distinta a la de 2011. “Es como un talco, muy volátil. Si bien no es tóxica, puede irritar los ojos y la boca al respirar”.
Los vientos estuvieron orientados hacia la zona sur de Neuquén, por lo que afectaron las localidades cordilleranas. La situación compleja del polvillo en el aire obligó al plantel del club Independiente de esa provincia a entrenar con barbijo.
Según las autoridades consultadas por PERFIL, de no producirse nuevas precipitaciones de ceniza, se estima que todo podría volver a su normalidad dentro de unos diez días.
Otros casos. En Villa La Angostura la situación es de absoluta calma. Distintas cuadrillas de Defensa Civil y personal de la municipalidad colaboraron ayer en las tareas de orden para que los habitantes y turistas recuperaran la normalidad de la ciudad. Por su parte, los productores lentamente comenzaron a limpiar sus cosechas y terrenos.
Y para beneficio de los turistas afectados, las autoridades pidieron a los hoteles que los mantuvieran alojados sin cargo hasta que pudieran volver a sus lugares de origen. Marcelo García Leyenda, secretario de Turismo de la ciudad de Villa La Angostura, destacó que en los últimos días llegaron mil turistas y ahora quedan 300, lo que equivale al 10% de la capacidad hotelera total.
El mismo panorama se vive en San Martín de los Andes. Eduardo Solís, segundo jefe de Bomberos de esa localidad, relató que “la gente reaccionó mejor que en 2011. Fue más consciente y se quedó en sus hogares esperando ver la evolución de los acontecimientos”.