El gobierno de Chubut presentó ante la justicia federal de Comodoro Rivadavia una denuncia penal por el derrame de petróleo que causó un desastre ecológico en la localidad de Caleta Córdova. En el lugar, se encuentran trabajando brigadistas empeñados en salvar a unas 60 aves que resultaron afectadas por la mancha del hidrocarburo.
Aunque aún no se conocen las causas del derrame, la investigación apunta a la monoboya de Caleta Olivares que opera la empresa Terminales Marítimas Patagónicas, de la que participan con acciones las principales compañías que operan en la cuenca para extraer el llamado "petróleo escalante".
Desde el gobierno chubutense argumentaron que " se han violentado normas constitucionales y legales en materia de protección ambiental, así como el derecho al medio sano y equilibrado de los ciudadanos de la Provincia".
En la presentación, a la que adhirió la municipalidad de Comodoro Rivadavia, se responsabilizó a las empresas petroleras "por incumplimiento en el marco de las concesiones de operación, carga y descarga de hidrocarburos, plan de contingencia ambiental y deber de información".
Además se les exige "la responsabilidad ambiental de remediación y reparación del daño en el marco de la constitución nacional, provincial y las leyes respectivas".
Mientras tanto, alrededor de 60 aves nadadoras fueron rescatadas por las brigadas ecologistas para comenzar el tratamiento de recuperación, tras ser alcanzadas por la mancha de petróleo que se esparció sobre la costa.
Guillermo Caile, coordinador de áreas técnicas de la fundación "Patagonia Natural", aseguró que despachó a brigadistas a la zona para colaborar en la tarea de recuperación de las aves que deben ser limpiadas cuanto antes.
Los ejemplares mas afectados son "macaes" y "cormoranes", aves conocidas como "zambullidoras" que tomaron contacto con la mancha de petróleo en las incursiones de buceo que utilizan en procura de alimentación con una dieta a base de pequeños peces costeros.
La recorrida de los ecologistas determinó además que fueron afectados patos marinos y al menos dos pingüinos de Magallanes, aunque sobre esta última especie se teme que sean muchos mas con el correr de las horas ya que son aves que una vez empetroladas buscan la costa para no morir de frío.
Además de las aves, hay certeza de que al menos un par de lobos marinos de dos pelos (Arctocephalus australis) fueron observados con grandes manchas de petróleo sobre su cuerpo.
Fuente: Télam