Esta semana el cacique Qom, Félix Díaz, llegó a la Ciudad de Buenos Aires para participar de la audiencia pública que convocó la Corte Suprema de Justicia con el fin de resolver el conflicto territorial que vive la Comunidad La Primavera en la provincia de Formosa. Sin embargo, la Corte no se expidió todavía sobre el caso y pasó a un cuarto intermedio que en teoría se debería resolver esta semana.
La Fundación La Alameda, aprovechó la visita del carashé Qom y organizó una charla para que Félix Díaz hable sobre el conflicto territorial, la persecución y el hostigamiento permanente que viven por parte de los gobiernos provincial y nacional.
“Estamos sobreviviendo en una situación que es muy lamentable.Vemos como se mueren nuestros hermanos y familiares por las enfermedades que se han superado supuestamente en el mundo como la tuberculosis, la desnutrición, la neumonía”, se quejó Díaz, y se refirió a la muerte de su sobrina, Delina Díaz: ”No hubo ni un médico al que le interesó atender a esta mujer”.
“También hace poco murió Justina López, de 31 años, que no salió en ningún medio, ¿Saben por qué? Porque el marido apoya al Gobierno de la Provincia y le da verguenza denunciar estos hechos. Pero nosotros sí, nos duele que sigan muriendo hermanos nuestros, que son seres humanos, que tienen las posibilidades de tener acceso a la salud y no podemos ignorar estas muertes”, agregó.
El conflicto. La Comunidad Potae Napocna Navogo ( La Primavera) cuenta con 850 familias, que suman alrededor de 4200 personas. Está en conflicto por la ocupación de tierras comunitarias por parte del Gobierno formoseño, donde pretende levantar una sede Universitaria; y también con Nación desde que se creó el Parque Nacional Río Pilcomayo dentro del predio en disputa.
“Ya no queremos que el Estado nos diga lo que tenemos que hacer. Si vos pasás al otro lado ya sos el violador, el violento, el que no respeta las leyes”, dijo el cacique. “Cuando nosotros ocupamos nuestras tierras, la Justicia dice 'Usted, Félix Díaz, es usurpador'. Cuando queremos mantener nuestra cultura de pescar, cazar, recolectar, propio de nuestros ancestros, la Justicia dice 'Ustedes están violando una ley', la ley de conservación de un área protegida. Entonces, nos preguntamos: ¿Dónde están los derechos humanos?”, prosiguió.
En 2011, la Corte Interamericana de Derechos Humanos solicitó una medida cautelar al Estado argentino para “garantizar” la integridad física de los Qom en la Comunidad La Primavera. Sin embargo, esa medida se cumple a duras penas.
Además, la medida cautelar prohibe innovar en el territorio donde pretende construirse el edificio de la Universidad de Formosa. Uno de los aspectos claves para la causa de la Comunidad es el relevamiento territorial.
“La Gendarmería está ahí para garantizar la aplicación de esa medida cautelar, pero cuando acudimos a la Gendarmería nos dicen que no tienen competencia, porque es competencia federal y están en territorio provincial. Cuando llamamos a la Policía dice no, porque está la Gendarmería”, relató.
En 2006, se promulgó la Ley 26.160, cuando se decretó la emergencia territorial de los pueblos originarios en Argentina, se creó el Instituto de Asuntos Indígenas, encargado de hacer el relevamiento de los territorios. Sin embargo, a pesar de las declaraciones oficiales, nada se logró en estos años.
El año pasado, la Auditoría General de la Nación reveló a través de un informe que en tres años desde su aplicación, el organismo sólo llegó a revelar sólo un 4% de las comunidades existentes, teniendo un presupuesto de 24 millones de pesos gastados. Según revela el informe, no se pudo demostrar el destino del 60% del presupuesto ejecutado. Es por eso que la Corte exigió explicaciones que deberían presentarse esta próxima semana.
“¿Quiénes son los beneficiarios de esos relevamientos? Cómo me gustaría que un pueblo originario me diga 'Hermano, el Estado nos relevó el territorio", exclamó. "Hasta ahora no se ha hecho nada”, lamentó el cacique Qom.
Desde 2010, ya se registraron cerca de 15 muertes de los pueblos originarios. Frente a cómo cataloga el Estado estas muertes, el referente de La Primavera explicó: “Ya no podemos hacer nada. Cuando matan a un hermano, los forenses dicen que se trata de un suicidio. Cuando nos atropellan en la ruta lo caratulan como homicidio culposo. Cuando se mueren por enfermedades, dicen que es por muerte natural. Para nosotros es muy complicado”, sostuvo. “Un indígena menos es un problema menos para el Estado”, sentenció.
(*) Especial para Perfil.com