Un enorme galpón de tipo industrial, donde antes funcionó una arenera, se convertirá este fin de semana en la sede de la feria ArteBA/Focus, que por primera vez llega al sur porteño. En la Boca, a pocas cuadras de la Usina del Arte, con la participación de 30 galerías y más de 80 artistas, hoy y mañana presentarán un nuevo formato de exhibición del arte contemporáneo. “Elegimos hasta tres artistas por galería, y lo más novedoso es que el lugar se pensó, diseñó y adaptó en base a las obras que seleccionamos, por eso los visitantes no van a encontrar los típicos espacios de cada galería, como en la otra feria”, cuenta Florencia Battiti, una de las curadoras.
La llegada de la feria más importante del país es una nueva propuesta que tendrá La Boca, en su transformación en el Distrito de las Artes. Por eso, quienes visiten la feria este fin de semana podrán también disfrutar de otras acciones que habrá tanto en la plaza seca frente a la Usina, en el resto de las galerías o en el recorrido por las más de treinta paredes y medianeras pintadas e intervenidas por muralistas en la zona.
“Queremos romper con la idea de distancia y lograr que la gente pueda ir y volver caminando desde Puerto Madero hasta La Boca”, dice Diego Radivoy, director de Industrias Creativas porteño. Para eso, antes de fin de año terminarán las obras en el bajo autopista que buscan mejorar esa conexión. Y para eso, el gobierno porteño busca también concentrar varias actividades en la Usina, más allá de las artísticas: allí estuvo Obama con estudiantes y se hicieron las audiencias por los aumentos del gas, por ejemplo.
Durante La Noche de los Museos, el “entorno Usina” también fue una de las sedes principales del evento, con la muestra del fotógrafo norteamericano David La Chapelle y la retrospectiva de Kazimir Malevich en Proa. Además de las actividades propias del barrio, como la Noche de San Juan y el Día de La Boca.
Circuito. Prisma, Barro, Isla Flotante, Walden son algunos de los espacios que se sumaron al entorno, en un radio de diez cuadras. De hecho, en los últimos tres años se instalaron en la zona 46 talleres de artistas, cuatro fundaciones de arte, diez galerías y seis museos.
“Los fines de semana viene bastante gente, muchos jóvenes pero también familias, sobre todo cuando hay actividades en la Usina. Por eso entre todos nos comunicamos y ponemos de acuerdo sobre cuándo hacer las inauguraciones y generar un distrito para recorrer”, dice Juliana Fontalva, de Barro, galería donde se acaba de inaugurar la muestra de la artista Nicola Costantino.
Para muchos, además, el tipo de edificaciones que encuentran, ex fábricas y depósitos de tipo industrial, resulta ideal para el arte contemporáneo. “En mi caso, buscaba un espacio grande y cómodo para trabajar, y acá encontré uno donde funcionaba un estudio de filmación y fotografía, con techos altos y muy amplio”, dice el orfebre Marcelo Toledo, nuevo “vecino”, que este año mudó su taller al barrio.