No es lo mismo 35.000.000 de pesos que 35.000. Eso lo tiene más que claro el matrimonio López que reclama la abultada suma a la empresa Codere y que anunció que pelearán “hasta las últimas consecuencias”.
La disputa legal no será sencilla. La empresa propietaria del Bingo de Lomas del Mirador, Codere SA, anunció que no está dispuesta a negociar con la cliente que según el display de la máquina tragamonedas en la que jugó, ganó ayer más de 35 millones de pesos, al insistir en que hubo un "error" en el aparato y que sólo se le pagaría "35 mil pesos".
Así lo informó el vicepresidente de Codere SA, Héctor Luna, quien estimó que "no sería lógico que esto termine en una negociación con abogados, nos estaríamos contradiciendo", porque, según dijo a radio Continental, esas máquinas tragamonedas tienen especificado el monto máximo que se puede ganar.
En la madrugada del domingo pasado, Verónica jugó en el tragamonedas de la casa de juegos, en la localidad de Lomas del Mirador, partido de La Matanza, donde la máquina le indicó que había ganado esa extraordinaria suma.
Su esposo, Ángel fue terminante: “Nosotros ya tenemos asumido que vamos a seguir hasta las últimas consecuencias”, definió en conversación con radio Mitre.
“Deje bien aclarado lo que me parecía justo y lógico”, explicó para luego rechazar terminantemente que vayan a aceptar la oferta del bingo.
Luego, se mostró preocupado por su seguridad. “Tenemos un temor lógico, tenemos hijos y sobrinos, estamos en la Argentina”, admitió.
Juego sincero. Por su parte, Verónica señaló que "en ningún lado figura cuánto va a ganar". La empresa, de capitales españoles, adujo que se trató de un error técnico. “Eso lo verá mi abogado”, indicó.
“No arreglé nada con Codere porque no necesito la plata”, dijo a Canal 9, para luego agregar que los 35 millones de pesos, fueron ganado “en buena ley”.
"Uno va y juega, con la sinceridad de un jugador" y aclaró que "yo no soy jugadora, jamás juego".
Cuando la empresa no quiso pegarle la impresionante cifra que indicaba la máquina en su pantalla, la mujer se atrincheró en la máquina tragamonedas.
Hasta las últimas consecuencias. En declaraciones al diario Crónica se mostró agradecida “con toda la gente que me apoyó adentro y afuera del bingo” y detalló que “si no fuese por ellos no podría reclamar nada”.
Verónica se mostró tan decidida como su marido. “Mi reclamo es justo y voy a ir hasta las últimas consecuencias”, advirtió.
Respecto al argumento de la falla técnica, Ángel dijo que “ni mi señora ni yo estamos en condiciones de aceptar ese hecho porque no nos podemos responsabilizar de las negligencias que pueda cometer”.
