La paralización de los vuelos de cabotaje de Aerolíneas Argentinas provocó ayer complicaciones a cientos de pasajeros, entre ellos a un padre que no pudo regresar a San Juan con el cadáver de su hijo, de siete años.
"Necesito que mi hijo descanse en paz, quiero que me den una solución", decía desesperado el hombre, protagonista de uno de los casos más angustiantes en el Aeropuerto de Ezeiza, donde fueron derivadas desde ayer todas las partidas y regresos por las obras encaradas en el Aeoparque Metropolitano.
Ante las cámaras de televisión, el hombre explicó que su hijo había fallecido en el Centro Gallego, de esta ciudad, y que debía regresar con el cuerpo. Inclusive, explicó que el gobierno sanjuanino le comunicó que el avión provincial estaba "roto". "Quiero darle una buena sepultura. Tengo el certificado de defunción, es una locura", comentó el hombre respecto de la situación vivida en Ezeiza.
La paralización de los vuelos de cabotaje de Aerolíneas Argentinas se originó por "una pelea" protagonizada dentro de un avión por un comandante afiliado a la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA) y un copiloto perteneciente a la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA). El vuelo debía despegar desde el aeropuerto de Posadas, en Misiones, pero no lo hizo debido a la disputa.
Los gremios están enfrentados por la exclusividad de la representación gremial del personal a cargo de los vuelos.
Fuente: DYN