Florencia Kirchner estuvo en Bariloche, realizando como tantos miles de chicos el ansiado viaje de egresados. Como se sabe, las autoridades municipales de la ciudad patagónica han instrumentado hace mucho un control de alcohol en los alojamientos estudiantiles, tarea a la que se vieron obligados ante las barbaridades que provocaron chicos en estado de ebriedad.
Sin embargo, la agencia de noticias Bariloche (ANB) reveló que cuando los inspectores de turismo intentaron el pasado jueves cumplir con el rutinario control en el hotel Flamingo, y llegado el caso decomisar las bebidas alcohólicas que los estudiantes muchas veces esconden en sus habitaciones, los guardias de la joven K impidieron la revisión. "Vuelvan la semana que viene, cuando no esté Florencia", les dijeron irónicamente a los empleados municipales. El tema, por supuesto, llegó hasta la máxima conducción del municipio, pero el intendente Marcelo Cascón no quiso líos y avaló que la revisión de habitaciones no se haga.
El Hotel Flamingo -ubicado en la primera cuadra de la calle Mitre, está a pocos metros del Centro Cívico. El intendente Cascón reconoció ayer por la tarde el hecho de la frustrada revisión a ANB y contó que se había enterado "informalmente" de la llegada de Florencia Kirchner a Bariloche.
Para Cascón, la Secretaría de Turismo actuó "con buen criterio" al no realizar las inspecciones en ese hotel. "Lo decidieron desde Turismo, pero yo hubiera hecho lo mismo", explicó insólitamente el jefe comunal. Todo el proceso quedó asentado en un acta del área de Inspectores de la Secretaría de Turismo municipal.
Fuente: Agencia de Noticias Bariloche