El juez que investiga la explosión de un edificio en Rosario, Javier Beltramone, imputó hoy a los administradores de los tres inmuebles siniestrados, Mariela Calvillo y Carlos Repupilli, por "estrago doloso agravado", tras escuchar testimonios de vecinos y habitantes del complejo.
Los trabajos para demoler los restos del edificio en el que se produjo la explosión comenzarán en 10 días, afirmó el secretario de Hábitat de la provincia, Gustavo Leone, y adelantó que después "comenzarán las tareas de corte y desarme de las torres que quedaron en pie".
Fuentes judiciales informaron que, para imputar a los administradores, Beltramone consideró intercambios de e-mails entre Calvillo y Repupilli con los vecinos, en los que se evidencia una presunta omisión de los deberes como responsables del mantenimiento del inmueble.
El magistrado también había imputado por los mismos cargos al gasista Carlos García, quien realizaba tareas en el edificio de Salta 2141 minutos antes de la explosión que dejó un saldo de 21 muertos y más de 60 heridos.
El juez de la causa recibió ayer una segunda recusación, que también rechazó, presentada por los administradores del complejo. La recusación fue similar a la que hizo el lunes la empresa Litoral Gas, cuyo pedido de apartamiento fue rechazado el miércoles por el magistrado y elevado a la Cámara de Apelaciones.