SOCIEDAD
Abuso de poder

Gatillo fácil: diez años de cárcel para un policía que mató a un adolescente

Fabricio Gabriel Mazzuchelli fue hallado culpable de disparar con su pistola reglamentaria y vistiendo uniforme.

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Un ex cabo de la Policía Bonaerense que perteneció al Comando de Patrullas de San Isidro fue condenado este mes a 10 años de prisión por el homicidio de un joven de 16 años, en un caso de "gatillo fácil" ocurrido en 2001.

Se trata del policía Fabricio Gabriel Mazzuchelli, quien fue juzgado y condenado por el Tribunal Oral en lo Criminal 5 de San Isidro y fue detenido en la sala de audiencias, para luego ser trasladado a un penal bonaerense.

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El policía mató el 7 de marzo de 2001, con disparos de su pistola reglamentaria y vistiendo uniforme, al joven David Elías Vera Pinto, que estaba echado e inmovilizado sobre el asiento trasero de un automóvil.

Los familiares de la víctima consideraron "justo" el fallo del tribunal integrado por los jueces Raúl Neu, Ariel Introzzi Truglia y Mario Kohan, especialmente porque el fiscal del caso, Ricardo Juan, había pedido sólo cuatro años de cárcel al considerar que se trató de un caso de homicidio en exceso de legítima defensa, informó a DyN el abogado querellante, Martín Alderete.

El TOC5 condenó al acusado por "homicidio simple" y le aplicó una pena de 10 años de cárcel, seis menos que lo solicitado por Alderete en su alegato. La defensa del policía había pedido su absolución.

El otro policía enjuiciado, el sargento Horacio Omar Olivera, también del Comando de Patrullas de San Isidro, fue absuelto, ya que tanto la fiscalía como el particular damnificado no pidieron al tribunal ninguna condena, tras considerar que durante el debate no se habían reunido pruebas suficientes que lo incriminaran.

Los dos policías  habían sido cesanteados por el Ministerio de Seguridad bonaerense, a través de la división Asuntos Internos. "Estamos conformes con el fallo, básicamente porque el tribunal nos dio la razón al entender que no existió una situación de legítima defensa y terminó condenando al acusado por homicidio simple. La familia consideró justo el monto de la pena y que se haya hecho efectiva la detención en la sala de audiencias para evitar peligro de fuga", dijo Alderete.

El caso se produjo el 7 de marzo del año 2001, cuando Vera Pinto y otras personas se encontraban a bordo de un automóvil Volkswagen Gol, en la zona de la localidad bonaerense de Villa Adelina. Los policías Mazzuchelli y Olivera notaron una actitud sospechosa de los ocupantes, por lo que procuraron identificarlos, pero se dieron a la fuga. Así, se inició una persecución que culminó en el interior del barrio Santa Rita, en Boulogne, donde el Gol frenó y sus ocupantes escaparon, salvo Vera Pinto.

De acuerdo con el relato de Alderete, los policías frenaron detrás del vehículo mientras que Mazzuchelli se acercó con su arma reglamentaria hasta donde estaba Vera Pinto, a quien le apuntó. El abogado dijo que el adolescente se encontraba recostado sobre el asiento trasero con las manos en alto mientras pedía que no lo maten. Según el abogado, el policía efectuó cinco disparos, uno de los cuales impactó en la cabeza de Vera Pinto y los restantes en el abdomen.

El chico fue llevado al hospital de Boulogne y trasladado luego al de San Isidro, donde falleció. Un testigo que declaró en el juicio comprometió al policía al señalar que lo vio disparar contra el vehículo diciendo "ahora te mato". Alderete dijo que durante la instrucción de la causa se sucedieron "maniobras para encubrir el hecho, como la desaparición de la ropa de la víctima y de proyectiles que habían quedado dentro del cuerpo".

Fuente: DyN