Legalmente, quien deja de pagar pero tiene intención de saldar sus deudas, se presenta ante el juez explicando que no está en condiciones de abonar lo que debe. Así se le otorga un plazo para exponer una propuesta de pago que debe ser aprobada por el magistrado y los acreedores del solicitante; y es precisamente en estas instancias en las que estaría actualmente el “Negro”. En caso de no llegar a un acuerdo, el juez podría decretarle la quiebra.
Esto se condice con un hecho que ocurrió la semana pasada en la puerta de Radio 10, donde el locutor conduce El oro y el moro todas las mañanas. Muchos pensaron que se trataba de una broma: para sorpresa de todos, un grupo de abogados secuestró con una grúa el auto de González Oro de la puerta de la emisora.
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