Un día, una médica sudafricana que se encontraba de guardia en el hospital en el que trabajaba recibió la visita de una víctima de una violación. La mujer se encontraba destrozada y la doctora no hallaba forma de consolarla. Desde aquel día la doctora Sonnet Ehlers juró que algún día ayudaría a las víctimas del abuso sexual y ese momento lleg ó.
Según publica CNN Sudáfrica, la doctora Ehlers creó un profiláctico con dientes que se coloca en la vagina, y ante una violación el pene queda atrapado y cualquier movimiento para intentar sacarlo lastima la piel. Es como una mordida y sólo un médico puede sacarlo.
Es un perservativo de látex que se inserta de la misma manera que un tampón. Tiene ganchos, que son los que se encargan de quedarse agarrados al pene. La neutralización del violador es tal, que el hombre no puede orinar ni caminar.
