La hija menor del rockero Gustavo Kupinski, Bianca, de dos años, continúa "sin actividad cerebral" desde que el martes se diera a conocer la triste noticia. "Sigue igual, sin cambios", confirmaron hoy a Perfil.com en el hospital El Cruce de Florencio Varela donde la niña se encuentra internada desde el martes 4, cuando el ex guitarrista de Los Piojos y su mujer murieron en un accidente de tránsito, cuando viajaban a la Costa junto a sus dos hijas, Bianca y Lara, de 4 años, quien sólo sufrió heridas leves.
El miércoles último, Leonardo Busso, responsable del área de terapia intensiva pediátrica del hospital donde está internada Bianca, informó que la nena tiene "signos compatibles con la muerte encefálica". Y destacó que desde el martes suspendieron la medicación, a la espera de "que el dopaje de las drogas llegue a un rango sub terapéutico para que podamos hacer el diagnóstico", según informó Télam.
Además, detalló que aún no pudieron definir el diagnóstico "porque Bianca recibió drogas que actúan sobre el sistema nervioso central porque llegó aquí en un estado crítico y debimos hacerle un tratamiento para la presión intracraneala y para la contusión pulmonar bilateral que tuvo". A dos días de este informe, sin embargo, el estado de Bianca sigue siendo el mismo, "sin cambios", como atinaron a informar hoy en el hospital ante la consulta de Perfil.com.
La niña llegó a este grave estado porque "la lesión inicial que fue la que sufrió en el lugar del accidente generó una isquemia, que es una falta de oxigenación tan importante en el cerebro que lamentablemente en este momento se encuentra sin actividad cerebral", destacó Busso.
El accidente ocurrió el pasado 4 de enero, cuando el auto que conducía Kupinski, un Citroen Xsara, se despistó cerca de las seis de la tarde y volcó a la altura del kilómetro 12,5 del camino que une la Autovía 2 y la ruta interbalnearia 11. En el accidente murió quien durante 20 años tocó en Los Piojos y últimamente integraba Las Pelotas y lideraba Revelados, pero también falleció su esposa, Flavia Cuellar, mamá de Bianca y de Lara. Esta última solamente sufrió una fractura en uno de sus brazos y ya recibió el alta del hospital San Roque de Dolores.
Según informó el director provincial de Emergencias Sanitarias, Adrián Tarditti, ninguno de los cuatro miembros de la familia que iban en el auto, llevaba puesto cinturón de seguridad, por lo que las dos niñas salieron despedidas violentamente del vehículo.