La marihuana que se vende y consume ilegalmente en la actualidad en Argentina es más tóxica, adictiva y peligrosa que antes, por modificaciones genéticas realizadas por los narcotraficantes, según un informe del gobierno difundido hoy.
El secretario de Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar), José Ramón Granero, informó que "la biogenética que aplicaron los narcotraficantes a la planta" permitió "triplicar" la presencia del principio activo del cannabis, el tetrahidrocannabinol, conocido por su sigla THC.
"El THC es por lejos el principio más adictivo de los 400 que registra la marihuana, el más cancerígeno. Es el que genera la adicción y que lesiona el lóbulo frontal del cerebro. Ese principio ahora se ha triplicado" por las modificaciones genéticas, informó el funcionario.
La marihuana, según un estudio de 2006 del Observatorio de Drogas de la Sedronar, es la primera sustancia psicoactiva ilegal más consumida en el país: más de 2,75 millones de personas, de 12 a 65 años, alguna vez la probaron, es decir el 15,8 por ciento de esa población.
Granero calificó como "un mito" que esa sustancia no sea tóxica, debido a que "es una droga con sustancias psicoactivas muy potentes, que impactan sobre el sistema nervioso central, el cerebro y el aparato cardiovascular". "La marihuana no es una droga blanda, es una mentira que se está instalando" en amplios sectores de la sociedad, tanto en Argentina como en otros países del mundo, aunque aclaró que los gobiernos empezaron a aplicar cambios en las políticas.
Según datos del Registro Continuo de Pacientes en Tratamiento de la Sedronar, la marihuana es la droga ilegal más consumida como droga de inicio y tiene "la condición de puerta de entrada a sustancias más adictivas".
"Brotes psicóticos asociados al consumo de cannabis, arritmias cardíacas, estados de pánico y trastornos mentales, especialmente entre los adolescentes", son algunas de las afecciones provocadas por esa sustancia, dijo el funcionario.
De todos modos, el titular de la Sedronar también aclaró que investigadores del Observatorio "han puesto el ojo sobre estas modificaciones genéticas, en particular sobre la variedad 'Jack Heller' que hace dos o tres años se ofrece en diversos portales de Internet".
"Los vendedores garantizan entre un 15 a un 20 por ciento de THC, lo que significa que es más de 10 veces más potente que la 'vieja marihuana'. Incluso existe un híbrido múltiple, la 'Sensi Jack Herer', que según quienes la comercializan, es el resultado de largos años de mejoramientos selectivos", consignó Granero.
El secretario de Estado advirtió que ese producto, de alta peligrosidad, se produjo "combinando tres de las variedades más fuertes conocidas, con una potenciación que promete niveles de hasta 31 por ciento de THC".
La marihuana fue una de las más mencionadas en una eventual lista de sustancias cuya tenencia no debiera ser penalizada, en el marco del debate abierto por el ministro de Justicia, Aníbal Fernández, de una reforma integral a la denominada "Ley de Drogas" para descriminalizar a los adictos.
El organismo que encabeza Granero, quien se declaró en contra de la despenalización, también estableció en la última edición del "Estudio nacional sobre consumo de sustancias psicoativas" que el 6,9 por ciento de la población de 12 a 65 años consumió esa sustancia en el último año, pero que su uso habitual y la dependencia tienen porcentajes muy altos.
Un 30,8 por ciento de los usuarios presenta consumo ocasional de algunas veces durante el año, un 35,5 tuvo un uso semanal, y el 11,3 tuvo un consumo diario: "Los indicadores de dependencia indican que casi el 30 por ciento de los consumidores recientes, cerca de 330 mil personas, se incluyen en la categoría de dependientes", consignó el estudio.