El clima agobiante que se registró este martes durante todo el día en gran parte del país comenzó a ceder en las últimas horas, con intensas precipitaciones en la ciudad de Buenos Aires y la caída de granizo en varias zonas del conurbano bonaerense. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) había emitido un "alerta por tormentas fuertes, ráfagas y ocasional caída de granizo" para una zona amplia del país y la llegada de la lluvia provocó alivio ante una sensación térmica demoledora.
La lluvia, que por momentos fue intensa, provocó que en la ciudad de Buenos Aires la sensación térmica bajara 19 grados, en tanto que la temperatura también tuvo un brusco descenso. Las precipitaciones afectaron primero al este de la provincia de Buenos Aires, el centro de Santa Fe y la totalidad de Entre Ríos, indicó el SMN en un comunicado oficial.
El fenómeno climático fue intenso en algunas zonas, y estuvo acompañado de ráfagas y ocasional caída de granizo. Los habitantes de los partidos bonaerenses de Ezeiza y Esteban Echeverría revelaron que, desde cerca de las 16, se registraron lluvias y caída de granizo de moderada dimensión.
En el Aeropuerto de Ezeiza, por su parte, las ráfagas de viento y el granizo provocó la rotura de la cúpula de vidrio que cubre una imagen de la Virgen de Luján, como también la caída de un árbol que estuvo cerca de impactar con un árbol. Poco antes de las 19 llegó la lluvia a la Ciudad, donde el gobierno porteño emitió la habitual serie de recomendaciones ante la posible intensidad del fenómeno climático.
Para hoy, miércoles, se anunció que la mañana se presentaá inestable, pero a mediodía quedará superada la posibilidad de tormentas y el sol volverá a ser el dueño de la escena. Según estima el SMN, la máxima rondará los 29 grados y desde el viernes, nuevamente la térmica volverá a "calentar motores".