Más de 70 personas debieron ser asistidas en distintas clínicas de la Ciudad de Buenos Aires durante las primeras horas del 2010, debido a distintas lesiones provocadas por el mal uso de pirotecnia. Entre los heridos se encuentran dos chicos (de 7 y 9 años), a quienes les explotó en la cara un petardo que dejaron encendido dentro de una botella de vidrio.
Los niños llegaron al Instituto Lagleyze en las primeras horas de hoy y, de acuerdo a voceros del la clínica especializada en oftalmología, "serían operados durante esta mañana, una vez que estén los resultados de los estudios que se les practicaron". En total, a la clínica ubica en la avenida Juan B. Justo recibió a 35 pacientes heridos por lesiones de pirotecnica, de los cuales 7 tuvieron que ser internados.
En tanto, 22 pacientes fueron asistidos en las últimas horas en el Hospital del Quemado porteño, también como consecuencia de las heridas sufridas por el mal uso de artículos de pirotecnia. La médica Myriam Miño, jefa de guardia del centro asistencial, explicó esta mañana a la agencia DyN que "hoy fueron asistidos 22 pacientes. Dos de esos casos -un menor y un mayor- presentan heridas graves en sus manos".
Miño indicó que "las lesiones que presentan estos dos pacientes son de carácter grave local que pudieron solucionarse con una sola cirugía plástica recuperatoria". La profesional indicó que si bien estos dos pacientes fueron atendidos en quirófano, sus heridas no revestían tanta complejidad como "el nene de Navidad al que le explotó una bomba de estruendo en una pierna, que debió ser sometido a cuatro intervenciones quirúrgicas".
Finalmente, otros 23 pacientes debieron ser asistidos en el Hospital Oftalmológico Santa Lucía por distintas heridas provocadas por artículos de pirotecnia, corchos o golpes en peleas callejeras. Voceros del centro asistencial informaron que "hubo un caso considerado de gravedad, de un paciente que presentaba el estallido de globo ocular, por lo que en las próximas horas sería intervenido quirúrgicamente".