Un comisario retirado de la Policía Bonaerense de 79 años fue asesinado ayer por la tarde cuando estaba en su auto, parado ante un semáforo en la ciudad de Merlo, en el oeste del conurbano, y las autoridades investigan, además de un posible robo, si fue un crimen de características mafiosas.
Fuentes policiales indicaron a DyN que el hombre, al que identificaron como Pedro Alberto Ragone, quien tendría una carnicería o negocios vinculados con ese rubro en el vecino distrito de Marcos Paz, fue ultimado aparentemente de al menos un balazo cuando se encontraba en su auto Volkswagen Bora detenido ante un semáforo de ruta 40 (ex 200) y Vidt.
Los voceros señalaron que se está buscando al menos a dos personas responsables del ataque, las cuales algunos datos preliminares recabados en la pesquisa "podrían tener entre 20 y 30 años". Explicaron que todo ocurrió alrededor de las 14, cuando Ragone paró en el lugar y se le puso a la par otro rodado de tamaño mediano color oscuro, con vidrios polarizados.
"La ventanilla fue destrozada y entonces el delincuente entró el torso dentro del habitáculo. Allí se habrían producido uno o dos disparos", añadieron las fuentes. "En principio, a simple vista se habría observado un orificio en la pierna derecha" de la víctima, "por lo que se trata de determinar si el balazo le interesó alguna arteria. De todas maneras, se trató de una muerte violenta y la autopsia determinará la causa del deceso", sostuvieron los voceros.
Otra posibilidad esgrimida por las fuentes fue que "quizás quisieron intimidarlo y se produjo el desenlace fatal", no obstante lo cual también seguiría inscripto en un caso de homicidio. Explicaron los informantes que "en principio no se notaron indicios concretos de robo, por lo que también se investigan otras hipótesis".
En ese marco, admitieron que se busca determinar si fue un crimen de características "mafiosas", y en ese contexto se apunta a confirmar o descartar un eventual ajuste de cuentas posiblemente relacionado con la actividad de la víctima. Fuentes cercanas a la investigación dijeron que tras el ataque los delincuentes habrían "revuelto la guantera del auto", aparentemente buscando algún elemento o documento que podría fortalecer esa teoría, e inmediatamente huyeron. Un vocero sostuvo que de acuerdo a testigos que "no estaban demasiado cerca" del lugar del hecho los atacantes "podrían tener entre 20 y 30 años".
Fuente: DYN