Atropellada por un colectivo que se dio a la fuga, murió una joven médica, que fue la primera en hacerle una pregunta a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en su conferencia en 2012 en la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, la misma en la que la mandataria comparó la sala con una clase en el partido bonaerense de La Matanza por las silbatinas que recibió.
Mariana Filgueira Risso murió tras ser atropellada el viernes pasado por un colectivo de la línea 118 en inmediaciones de la plaza Italia del barrio porteño de Palermo, cuyo conductor se fugó, informaron sus familiares.
La joven, quien era médica y jefa de Gabinete de la Subsecretaría de Salud porteña, fue atropellada en la avenida Las Heras el viernes a las 21, y el conductor del 118 siguió su marcha sin haberse detenido a auxiliarla, detalló su tía, Pilar Basombrio, quien pidió que eventuales testigos del episodio se presenten en la comisaría 23 de la Policía Federal.
"El colectivero venía rápido, discutió con alguien por la ventanilla, 'volanteó' el colectivo y atropelló a mi sobrina. Después, bajó junto a los pasajeros y, cuando nadie se dio cuenta, volvió a subir y se fue", denunció Basombrio.
La mujer completó que el hombre "se fue solo, con el colectivo vacío", a la vez que puntualizó que la joven fue trasladada al hospital Fernández, donde "llegó en coma" y murió el sábado, "cuando la desconectaron" de un respirador artificial.
Filgueira Risso había interactuado con la jefa de Estado a fines de septiembre de 2012, cuando la presidenta brindó una conferencia ante docentes y alumnos en la Escuela de Gobierno de la Universidad de Harvard, donde la joven permanecía como estudiante.
Fue la misma conferencia en la que la mandataria se enfrentó a un estudiante que le preguntó por qué no da conferencias de prensa en la Argentina. También hubo momentos de tensión por preguntas sobre el cepo cambiario y por la inflación, y luego la presidenta se quejó de los silbidos que recibió, con una desatinada frase: “Esas son cosas para La Matanza, no para Harvard".
Por entonces, la joven médica se había quejado de las preguntas “con fines políticos” de sus compañeros, lo que según ella impidieron que muchos estudiantes pudieran preguntar y sacarse dudas, después de un año de gestionar la visita de la mandataria.