SOCIEDAD
La brutal salidera en el Banco Santander de La Plata

"Nos llamó la atención que el cajero levantó las cejas y miró al hall", dijo la mamá de Carolina

María Ema Cometta de Píparo amplió su declaración judicialy volvió a apuntar al trabajador bancario que les pagó. Su hija sigue conectada a un respirador artificial.

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La situación del cajero del banco Santander Rio Gerardo Pereda, involucrado en el caso del ataque a Carolina Píparo, quedó hoy más comprometida, porque la madre de la mujer aseguró que tanto a ella como a su hija les llamó la atención que el empleado "levantó las cejas mientras miraba hacia el hall" de la sucursal. La mujer recordó además que el trabajador "se puso de costado mientras una máquina contaba los billetes".

Hoy, María Ema Cometta de Píparo amplió su testimonio -en su casa, porque no estaba bien de salud- para dar más detalles sobre el personal de la entidad bancaria y ratificar su descripción del autor del disparo contra Carolina, pese a que ayer la mujer no pudo identificar a Carlos Burgos, el joven de 18 años detenido y sospechado de ser el ejecutor del balazo. Al hablar sobre lo que ocurrió en el banco, la mamá de Carolina dijo que tanto a ella como a su hija les sorprendió que el cajero "levantara las cejas" y se pusiera de costado cuando la máquina contadora de billetes se activaba con el dinero que iban a entregarles, según informó hoy el fiscal Marcelo Romero. Sin embargo, las actitudes de Pereda no quedaron registradas porque lo tomaban de espaldas.

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"Lo del cajero queda en manos de la Justicia; yo tengo dudas, pero si es responsable que caiga sobre él todo el peso de la ley, porque declaré todo lo que vi", dijo la madre de Carolina. El fiscal Romero confirmó esta noche a DyN que "estos elementos de sospecha se suman a la causa porque son un elemento nuevo", pero aclaró que "el cajero ya está imputado, no procesado, por los dichos de la víctima, de su marido y ahora por la madre de la víctima". No obstante, Romero subrayó que por ahora no hay más elementos que estos, que no se está evaluando un nuevo interrogatorio al cajero y que la Fiscalía tampoco tiene sospechas para pensar en un segundo "marcador", como se estaba especulando.

"Es saludable que las defensas hagan sus cuestionamientos, pero la Fiscalía está trabajando muy fuerte, con prudencia, en miras al juicio oral, para que el día de mañana no nos digan que esto pueda dar lugar a nulidades", dijo el fiscal.

De esta manera, Romero respondió a los cuestionamientos que hizo el defensor de Carlos Burgos, que asegura que su cliente fue detenido porque es el hijo de un hombre arrestado por salideras y porque la policía necesitaba un preso. El abogado de Burgos, Rubén Carrazone, también subrayó que la madre de la víctima no pudo identificar a su cliente porque describió a alguien distinto a su representado.

Al respecto, el abogado Fernando Burlando, representante de la familia de la víctima, rechazó los dichos del defensor, remarcó que un matrimonio sí ubicó a Burgos en la escena del crimen, y advirtió que hay muchas pruebas más que lo comprometen a él y al resto de los detenidos. "Estamos a muy pocos pasos de que se resuelva la situación procesal de los imputados y se defina quiénes fueron todos los autores", dijo el abogado. Los querellantes, además, pidieron al juzgado que incorpore a la causa una segunda denuncia por una salidera ocurrida en el mismo banco al que fue Carolina y donde aparece el mismo cajero al que la joven vinculó con el ataque.

Se trata de un robo ocurrido en marzo de 2009 del que fue víctima una mujer llamada Teresa, a la que le robaron 20 mil pesos luego de que la atendiera el cajero Pereda, según la denuncia. En la causa de Carolina ya se anexó la denuncia de otra mujer que dijo haber sido víctima del mismo marcador y que estaba el mismo cajero cuando sufrió una salidera el 5 de febrero de 2010 en la sucursal Santander Río de calle 7 y 42.

Carolina Píparo, de 34 años, fue atacada el 29 de julio pasado cuando, con su panza de casi nueve meses, fue a retirar 10 mil dólares y 13 mil pesos para firmar la escritura de una casa que iba a comprar con su esposo. Cuando iba en su auto, junto a su madre, a 20 cuadras del banco, la joven fue interceptada por los ocupantes de una moto que la obligaron a bajar, la tomaron de los pelos y, tras golpearla, le pegaron un balazo que le entró en el mentón y se alojó en el pecho. Herida de gravedad, fue llevada de urgencia al hospital San Roque de Gonnet donde la sometieron a una cesárea que le permitió nacer a su bebé, al que le pusieron el nombre Isidro. Pero el chiquito solamente sobrevivió siete días; la joven aún permanece conectada a un respirador artificial y su estado es delicado.

En la causa hay nueve personas detenidas y hoy frente a los periodistas el abogado Burlando advirtió además que habría un segundo "marcador" de Carolina Píparo. Según dijo, se está tratando de identificar a través de las imágenes de las cámaras de seguridad si alguno de los ya detenidos fue el que cumplió ese papel de segundo "marcador".

Hasta ahora, las cámaras del banco Río Santander captaron como el "marcador" de Carolina a Miguel Angel "Pimienta" Silva, quien estuvo 10 días prófugo, se entregó la semana pasada y, aunque se esperaba que declarara hoy, recién sería indagado el viernes próximo asistido por su abogado particular.

Burlando puntualizó que "hay pruebas suficientes y testigos en el banco que hablan de un segundo "marcador", más allá de 'Pimienta' Silva", y que "se están haciendo todos los cotejos para saber si es una de las personas que ya están detenidas, como se cree". Pero el fiscal Romero relativizó a DyN esa posibilidad, al señalar que "no hemos identificado ningún movimiento" en ese sentido.

 

Fuente: DYN