El abogado Carlos Picón confirmó hoy que pedirá la elevación a juicio oral y el cambio de carátula en la causa por la desaparición de la maestra tucumana Ángela Beatriz Argañaraz, para acusar de asesinato a Nélida Fernández y Susana Acosta, las dos ex monjas procesadas por el crimen.
"Solicitaremos el cambio de calificación para que de privación ilegítima de la libertad y ocultamiento de persona se llegue a homicidio calificado por alevosía, premeditación y participación de tres personas, quienes le causaron a 'Betty' lesiones gravísimas que le produjeron el deceso", explicó el letrado.
Según Picón, la ausencia del cuerpo de la maestra –que desapareció hace 92 días- no representará un obstáculo para el cambio de carátula porque existe sobrada jurisprudencia en el país que avala una condena sin la aparición del cadáver.
Picón adelantó, además, que cuestionará la labor que desarrolla el abogado defensor de los acusados, Gerardo Morales, a quien acusó de obstaculizar el accionar de la Justicia desde el comienzo de la causa, con la presentación de una enorme cantidad de nulidades, pese a que no obtuvo ninguna sentencia favorable.
También criticó el silencio que mantienen las autoridades del colegio Padre Roque Correa, adonde trabajaban Acosta y Argañaraz, que no aportaron en forma voluntaria elementos para la causa, sino que todo debió ser obtenido a través de medidas judiciales.
92 días sin noticias. La docente desapareció el 31 de julio pasado cuando salió de su casa rumbo al colegio Padre Roque Correa, adonde trabajaba y estaba a punto de asumir como directora.
Desde entonces, no se tienen datos sobre su paradero. Como parte de la investigación, fueron detenidas Acosta y Fernández, en tanto que Julio Fernández, hermano de esta última, se encuentra prófugo de la Justicia y es buscado por la fuerza pública para que se presente a declarar.
La pista en la que trabaja con firmeza la fiscal Adriana Giannoni es la de alguna diferencia laboral entre las imputadas y Argañaraz, que estaba a punto de ser nombrada directora del colegio Padre Roque Correa.
Por su parte, Leonardo Coria y Picón, abogados de la familia Argañaraz, conjeturan que el móvil de la desaparición tiene que ver con que “Betty” habría descubierto irregularidades en el manejo de fondos en el colegio, en las que estarían involucradas las imputadas.
La hipótesis fue ratificada hace tres semanas por el testimonio de una amiga de Argañaraz, Carolina Fernández, quien, aunque sin dar nombres, declaró que “Betty” le había manifestado: "Son unas víboras, quieren serrucharme (sic) el piso".