Peritos analizan a ‘La banda del millón’ y aseguran que son psicópatas precarios

“La banda del millón” lo hizo de nuevo. Por segunda vez, los miembros de la organización delictiva optaron por ponerse frente a una cámara y difundir, el martes pasado, un video casero desde la clandestinidad con nuevas amenazas, exhibiendo armas y ocultando sus rostros con máscaras. ¿Qué pasa por la cabeza de delincuentes para mostrarse así en un video? Especialistas consultados por PERFIL sostienen que se trata de personalidades “narcisistas” y “psicopáticas”, pero también los vinculan con la era de la virtualidad y de las selfies. Además coinciden en que el objetivo primordial es buscar notoriedad y mostrar un “cierto poder”.

“Hoy la audacia de los maleantes es tal que hasta disfrutan exhibiéndose por televisión, camuflados con uniformes policiales y caretas terroríficas”, destaca el médico psiquiatra y legista Miguel Maldonado. Mientras que su colega Enrique De Rosa agrega: “Los delincuentes emblemáticos siempre han querido reconocerse y ser reconocidos ya que eso les genera seguidores. Y en una época de virtualidad de selfies y videos este accionar busca eso mismo. Es decir, es la adaptación a la época en la cual la imagen vale por cualquier manifestacion”.
 
Clandestinidad, impunidad, poder, amenazas, notoriedad, show. Podría tratarse de conceptos necesarios para planificar una escena de una película. Pero en este caso fueron usados para los dos videos que “La banda del millón” (quienes el 19 de septiembre pasado le robaron esa cantidad de dinero a un empresario en la puerta de un banco de General Rodríguez) realizó para amenazar al presidente Mauricio Macri y a periodistas, para acusar de liberar zonas a policías y de cobrar una recompensa por eso y para presentarse ante la sociedad con nombre y apellido, y atribuyéndose distintos delitos. “Armaron un video con impacto visual y el mensaje es: ‘No nos atraparon, estamos acá y nos ven, tenemos la plata, tenemos poder’. Es publicidad llevada a otro nivel, y es como los mensajes de los terroristas, ya que no hay que olvidar que terrorismo no es necesariamente hacer algo sino lograr infundir el miedo”, compara De Rosa.

Los especialistas coinciden en que deja en evidencia un aspecto “posiblemente narcisístico” del líder de la banda, Matías Milatich. Por su parte, Maldonado agrega que también se trata de un “psicópata precario”. “Quien hace de vocero y jefe demuestra una precariedad intelectual notable, pero también se percibe nítidamente su psicopatía, caracterizada por el orgullo en delinquir, la ostentación de impunidad que exhibe vociferando su nombre y número de documento, y la agresividad sin filtro que deja brotar en cada una de sus palabras. El jefe de la banda exhibe una falla grosera para ajustarse a las normas sociales, con repetición de actos delictivos y ostentación de los mismos. La ‘versatilidad criminal’ es una característica distintiva de ciertos psicópatas, que admiten su inclinación morbosa al delito”.