Decenas de personas debieron ser evacuadas en La Rioja por las lluvias fuertes y las crecidas de ríos en el noroeste del país Además, en la localidad catamarqueña de Fiambalá el temporal complicaba las tareas de asistencia a pobladores que continuaban aislados.
La ciudad de La Rioja, el gobierno de Catamarca y la comuna de Fiambalá conformaron en las últimas horas comités de crisis para coordinar la ayuda a los damnificados por las lluvias y el traslado de evacuados por las inundaciones.
En Fiambalá, camiones de Gendarmería lograron llegar en el mediodía de hoy hasta la orilla del río Antinaco para dejar agua mineral y alimentos para las personas que desde hace más de una semana quedaron incomunicadas. Tras el arribo de Gendarmería los vecinos usaron "árboles que estaban caídos" para armar un puente y así "cruzar provisiones" para los pobladores del sector este, dijeron fuentes de la municipalidad de Fiambalá a la agencia DyN.
La situación de Fiambalá se agravó porque anoche se produjo una crecida en el caudal de los ríos, lo que anegó varias viviendas e inundó viñedos. En el caso de Medanitos, la crecida del río Abaucán separó al distrito en dos partes y cubrió con agua y barro vehículos que, a modo de prevención, los pobladores habían estacionado anoche a unos 500 metros del cauce. En Tatón, el delegado municipal Rogelio Rasgido dijo que había algunos pobladores lesionados y que uno de ellos tenía un traumatismo de cráneo y aguardaba la llegada de una ambulancia 4x4 desde Tinogasta.
La gobernadora catamarqueña Lucía Corpacci se reunió esta mañana con un comité de emergencia para planificar la ayuda para los departamentos de Tinogasta, Belén y Santa María. Las lluvias que comenzaron anoche y se extendieron durante la madrugada de hoy también provocaron derrumbes en rutas de La Quebrada de la Cébila, un punto clave para la comunicación de la capital con localidades del noroeste afectadas por el temporal.
En La Rioja, más de 100 milímetros de lluvia cayeron hasta el mediodía de hoy en la capital, informó Defensa Civil. Ante ello, hubo calles inundadas, daños en casas precarias y cortes en las telecomunicaciones fijas y móviles que incluso afectaron el servicio de Defensa Civil.
El jefe de Defensa Civil provincial, Fabián Tapia, dijo que la capital riojana "no está preparada para un temporal atípico". El intendente Ricardo Quintela admitió que la ciudad "colapsó" y pidió a los vecinos "paciencia y preservar la vida adoptando medidas de seguridad", tras lo cual recomendó que "de ser necesario autoevacuarse, lo hagan".
