La muerte de Mauricio Tenembaum, fundador y referente de la Comisión Provincial por la Memoria, generó sentidas muestras de dolor y solidaridad con su familia. El enorme respeto a la figura del ingeniero Tenembaum, padre del reconocido periodista Ernesto Tenembaum, lo graficó de manera cabal el mensaje de despedida de la Comisión de la Memoria, definiéndolo como "una persona profundamente sensible ante las injusticias, el antisemitismo, la violencia y la miseria humana". Aquí están esas líneas:
"Con enorme tristeza, compartimos con ustedes la noticia del fallecimiento del querido Mauricio Tenembaum, miembro fundador y vicepresidente de la Comisión Provincial por la Memoria. A pesar del dolor que nos invade hoy por su pérdida, sabemos que su presencia y su legado nos acompañarán en cada una de las batallas que faltan conquistar para lograr ese mundo más justo y solidario por el cual tanto luchó durante toda su vida
Nacido en una familia judía de raíces proletarias y de izquierda, con una temprana militancia estudiantil y luego sindical, Mauricio fue una persona profundamente sensible ante las injusticias, el antisemitismo, la violencia y la miseria humana. Durante su vida tuvo una larga y vívida trayectoria dentro de la comunidad judía: presidió el Centro Cultural Israelita y la Biblioteca Max Nordau de La Plata; participó de la fundación del Movimiento Judío por los Derechos Humanos y del movimiento Convergencia, por un judaísmo humanista y pluralista.
Pluralidad y solidaridad fueron principios irrenunciables de su vida política; como un gran maestro, él siempre educó en la necesidad humana de contemplar el pensamiento de los otros y aprender de los otros.
Desde 1984 y hasta 1998 fue prosecretario de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA). Allí dejó su marca, su vocación por la vida y su deseo humanista por un entendimiento entre los pueblos. También dio muestra de su integridad moral cuando decidió retirarse de la DAIA, desprestigiada en su momento por autoridades que fueron cómplices en el encubrimiento al atentado de la AMIA. Tras su renuncia, fue invitado a participar de B'nai B'rith, la más importante organización internacional judía. Fue también director del Instituto Cultural Argentino Israelí de La Plata.
Mauricio fue un indispensable de nuestra Comisión por la Memoria, de la que fue parte ad-honorem durante casi 20 años aportando lo mejor de su sabiduría y sensibilidad por los vulnerados de la tierra. Con su entrañable amigo Polo Schiffrin fueron activos militantes en la defensa de la autonomía de nuestro organismo y de la necesidad de luchar no solo por verdad, justicia y memoria, sino también contra las violaciones actuales de derechos humanos.
En 2017, y haciendo un enorme esfuerzo personal por su estado de salud, integró la delegación institucional que viajó a las Islas Malvinas a reclamar por la identificación de los 123 soldados sepultados como NN en el Cementerio de Darwin, por justicia por los soldados argentinos torturados por sus superiores y por la soberanía Argentina de manera pacífica. Mauricio Tenembaum tenía 88 años y un profundo amor por la democracia y por la libertad. Es la mejor forma de despedirlo y recordarlo.
Hasta siempre, querido Mauricio".
Comisión por la Memoria