La discreción no es una de sus principales dotes. Walter Soto (32), un ex empleado de la Corte Suprema de Justicia de la Nación devenido “rey de la noche”, no habla en clave ni evita referirse a sus negocios y contactos en sus conversaciones con Loana Bergonzi (27), su presunta socia en el negocio de la prostitución vip.
En el marco de una causa que lo investiga por venta de drogas, la Agencia Federal de Inteligencia analizó su celular y descubrió cuál era la verdadera razón por la que viajaba tanto al exterior y se codeaba con ricos y famosos.
La acusación fue realizada por el fiscal federal Federico Delgado, quien en las últimas horas pidió que Soto sea procesado e indagado por el delito de trata de personas al igual que su socia en la productora We Love It, junto a otros cuatro sospechosos más.
Para el fiscal, tanto Soto como Bergonzi –ambos en libertad– se dedicarían a captar mujeres jóvenes a través de promesas de trabajo en el extranjero –preferentemente en Ibiza, España–, de eventos a los cuales asistirían personalidades famosas de “un mundo lleno de privilegios”. Por esta razón es que la causa preocupa a distintas personalidades del espectáculo, el deporte y la política que estarían vinculadas a Soto y Bergonzi.
Según fuentes judiciales, los investigadores del caso basaron la acusación en el contenido del teléfono del ex empleado de la Corte a partir de los mensajes de texto, las fotos y los videos (en uno de ellos aparece una actual participante de Gran Hermano) que encontraron en el aparato. También tuvieron en cuenta la información que surgió de los perfiles públicos de los sospechosos en las redes sociales.
Soto aparece en fotos rodeado de bellas mujeres de “aspecto aniñado”, pero también junto a personalidades de distintos ámbitos, como el coreógrafo Aníbal Pachano, el periodista Jorge Lanata o el futbolista Néstor Ortigoza.
A Emiliano Volpe, un relacionista público acusado en el marco de la misma investigación, se lo ve en una foto junto al cantante español David Bisbal y el abogado Fernando Burlando. En un mensaje Volpe le cuenta a Soto que “dos de sus chicas estaban con Bisbal”, y que por esa razón no habían podido concurrir a un evento.
“David Bisbal jamás ha tenido relación alguna con actividades de carácter delictivo. Expresamos nuestra absoluta indignación ante esta desagradable situación”, se defendió el artista español en un comunicado difundido por la empresa que lo representa.
Contactos y negocios. “Se realizó un entrecruzamiento de datos e información que nos permitió conocer la dinámica del negocio de la prostitución vip que manejaban”, explicó el fiscal Delgado en su presentación ante el Juzgado Federal Nº 9, a la que tuvo acceso PERFIL.
Para Delgado, “Walter Soto se dedica a captar mujeres, a quienes explota económicamente a través del sexo”. Así de claro. “Resultaron cruciales para la investigación los diálogos de WhatsApp así como los videos y las fotografías contenidos en el celular. Los diálogos que mantuvo Walter Soto con sus contactos varían, poseen sus matices, pero tienen algo en común: todos apuntan a captar chicas para explotarlas sexualmente en beneficio propio”, explica la fiscalía.
Según Delgado, “su socia en la productora We Love It, Loana Bergonzi, actuaba en un pie de igualdad con él, puesto que se demostró que no sólo tenía pleno conocimiento de las maniobras atribuidas a Soto sino que, incluso, en la mayoría de las ocasiones era la encargada de coordinar y organizar los ‘eventos’ en los cuales participaban las mujeres”.
We Love It es una productora que está integrada por mujeres jóvenes (menores de 22 años y con perfiles “aniñados”), algunas de las cuales “bailaban”, otras “hacían presencia” y muchas “hacían de todo”, tal como surge de los diálogos que acompañan la denuncia del fiscal. “Obviamente, por estos últimos servicios las tarifas que percibían eran mucho mayores”, se indica en la causa.
En el escrito de Delgado figura un mensaje que supuestamente le envió Aníbal Pachano a Walter Soto. Pachano le pide “que lo tenga en cuenta para trabajar junto a él en España y a su vez le ofreció contactos de organizadores de fiestas electrónicas en ese país”. “Este hecho sólo prueba el contexto en el que los imputados se desenvolvían”, se aclara en la presentación del fiscal para evitar cualquier confusión sobre el rol del artista en la red de prostitución vip, que preocupa a ricos y famosos que estaban en contacto con Soto y “sus chicas”
Un político “importante”
“Julieta Abril” es una de las chicas preferidas de Walter Soto. En una ocasión –según consta en la presentación del fiscal federal Federico Delgado– el acusado le habría conseguido una cita con “uno de los políticos más importantes”.
Julieta le escribió: “Dice dos garchas (sic)”. Soto le contestó: “Ahí es donde decidís vos. Decile que es un poco más de plata. Minutos después Julieta volvió a escribirle: “Me quiere coger de nuevo y no quiere pagar mas”. Soto le contestó: “Ya está decile que no”. Julieta insistió: “Me quería garchar (sic) de nuevo gratis. Yo te pregunto a vos porque no sé”.