Regular la actividad de los peluqueros en la Ciudad es la verdadera misión del proyecto. Sin embargo, los detalles de la iniciativa, elaborada por el reconocido estilista Fabio Cuggini y presentada en la Legislatura porteña por su vicepresidente primero, Cristian Ritondo, ya genera debate entre profesionales de la actividad. Entre los puntos destacados se prevé la creación de un seguro por mala praxis.
El proyecto aborda también el tratamiento de enfermedades de transmisión sanguínea y el manejo de los desechos y prevé la creación de un Colegio Público de Profesionales Peluqueros, cuyo objetivo es llevar un registro de cada uno de los trabajadores, que deberán matricularse.
El punto más curioso es la implementación de un seguro o caución por mala praxis. “Es por una cuestión de formalidad: el Estado supervisa y el profesional tiene que tomar los recaudos, como cualquier médico”, destacó el peluquero Cuggini. El artículo 6 de la iniciativa explica que el seguro es para garantizar el derecho de los usuarios en caso de sufrir daños por la actividad de los peluqueros, y que el monto deberá ser regulado por el Colegio de Profesionales. “El seguro real será afectado al pago de los daños y perjuicios que ocasione el mal desempeño de la actividad del matriculado”, indica el proyecto de ley. También obliga a contratar el seguro.
Bebe Sanders apoya la iniciativa pero desestima la aplicación del seguro por mala praxis: “Nuestra actividad no es como la de un médico, es un rubro donde se habla mucho con los clientes antes de hacer el trabajo”.
El diputado Ritondo coincidió con Cuggini y remarcó que en el proyecto están comprendidas situaciones de formación, educación y manejo de desechos, para avanzar “hacia una profesión estandarizada, responsable, capacitada y matriculada”. El legislador justificó la iniciativa en que “profesiones y ejercicios liberales que forman parte de la rutina aún no están debidamente enmarcados en una normativa que contemple las responsabilidades e idoneidades de quienes la practican”.
Miguel Romano es otro reconocido estilista que se mostró de acuerdo con el proyecto y explica que “es necesario para proteger a profesionales y clientes. Está muy desprestigiado nuestro trabajo, ojalá se apruebe la ley”, se entusiasma.
Sobre el tratamiento de los desechos, el artículo 13 indica que se deberán separar los elementos peligrosos y que los productos químicos deben ser manipulados con la debida protección. Se exigirá a los profesionales estudiar en escuelas autorizadas e informarse sobre enfermedades de transmisión sanguínea.