Cristina Fernández de Kirchner cerró esta semana la Segunda Reunión de Autoridades Nacionales en Materia de Trata de Personas de la Organización de Estados Americanos (OEA). En su discurso, la mandataria dijo que “ sin clientes no se cometería” y afirmó que d esde 2007 se produjeron en el país más de 600 desapariciones relacionadas con la trata.
La demanda de cambios fundamentales, tanto en el sistema judicial nacional como a nivel cultural, es una bandera común para los organizadores del encuentro, aquellos que trabajan día a día en ONG´s e instituciones y para quienes que sufrieron en carne propia este delito.
Teresa Ulloa, directora de la Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe, expresó, en diálogo con Perfil.com: “Yo estuve participando en la reunión preparatoria de Washington, donde decidimos y plasmamos en el documento que presentamos que queremos que se criminalice la demanda. Tal vez por eso ahora se declaran es ese sentido”. La referencia fue a los discursos tanto de Cristina como de Aníbal Fernández. “Hay que visibilizar al que compra como un actor central en el proceso de trata, porque es el motor. Si ese último destinatario no existiera, tampoco habría trata de personas”, agregó.
“Se necesita un cambio cultural”, expresó por su parte Sara Torres, Presidenta en la Argentina de la Coalición Internacional Contra la Trata de Personas y co-coordinadora de la Red No a la Trata. En ese sentido, se mostró conforme con el hecho de que desde las autoridades se comience a hablar del rol central de los clientes.
En cuanto al compromiso que mostraron las autoridades, Torres se mostró complacida. Frente a un desinterés demostrado hasta el momento, celebró la presencia de la Presidenta y pidió que se comiencen a cerrar los prostíbulos que existen en el país. También apuntó a que se modifiquen ciertos puntos de la ley que vio la luz el año pasado: las penas para los proxenetas -” el que roba tiene más pena que el que trafica” y la necesidad de que las mujeres mayores de 18 años deban demostrar que fueron raptadas y explotadas contra su voluntad. “Esto es un disparate jurídico”.
Homenaje a una luchadora. “Esto a mi me fortalece y me da más fuerza para seguir buscando tanto a Marita como a todas las victimas”, expresó Susana Trimarco, madre de Marita Verón, luego de haber recibido de manos de la Presidenta una distinción por su lucha contra la explotación, esclavización y prostitución de miles de chicas en el país.
“De a poco el Estado se va comprometiendo. Cuando desapareció Marita yo estaba sola”, agregó Trimarco, que desde 2002 busca incansablemente a su hija, víctima de una red de proxenetas. Sobre la presencia de Cristina, aseguró que fue importante su participación en el encuentro porque puede llevar a mejorar la ley. “Ella es una mujer comprometida por los Derechos Humanos”, destacó.
Trimarco también agradeció la presencia de Aníbal Fernández. “Fue él quien me ayudo a organizar la Fundación María de los Ángeles. Todas las personas que trabajan ahí lo pueden hacer por los recursos que él nos proporcionó y que vienen del Estado. Pero yo no me conformo con eso porque a mi hija no la encontré y hay que seguir buscando a todas las chicas. Yo agradezco, pero exigimos más compromiso. Hay que capacitar a los jueces, difundir el tema”, dijo a Perfil.com Trimarco.
Trimarco presentó un documento a la OEA, el cual buscará debatir con las autoridades nacionales, sobre los aspectos de la ley que se necesitan modificar. “ Es muy importante que la Justicia haga un embargo sobre las propiedades que estos delincuentes compran a costillas de la tortura que sufren las chicas y que se cree un fondo para cubrir el tratamiento de las víctimas”, detalló Trimarco una de las ideas. Además, pedirá más penas para los proxenetas. Sobre el final, destacó el importante rol de difusión que tuvo la novela “Vidas robadas” y el compromiso de la actriz Solita Silveyra.
(*) Redactora de Perfil.com