SOCIEDAD

Tucumán: una docente universitaria debió recurrir a la Justicia para seguir dando clases

Marta Gerez Ambertin es profesora en la Facultad de Psicología desde hace 34 años. Pidió una extensión de su jubilación que avala una ley nacional, pero no obtuvo respuesta.

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Una docente de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), que lleva 34 años dando clases en esa casa de estudios, debió recurrir a la Justicia para seguir dando clases, luego de que la Facultad de Psicología no respondiera durante más de un mes a su pedido de continuar en su cargo hasta cumplir los 70 años, tal como lo establece una nueva ley nacional para jubilaciones de docentes universitarios.

Se trata de la Marta Gerez Ambertin, reconocida intelectual tucumana y autora de más de una decena de libros, que ejerce desde 1993 como profesora titular full time en la cátedra de Contribución del Psicoanálisis (Escuela Francesa), y con igual cargo en la Cátedra de Semiosis Social. "El 20 de septiembre le envié a la Facultad de Psicología una solicitud para permanecer en el cargo, porque el 22 de noviembre se me vencía por concurso, y como ya tengo 68 años y una resolucion de la universidad dice que a partir de los 65 años no me pueden llamar a concurso, iba a quedar afuera. Pero una nueva ley nacional (N° 26.508, sancionada en 2009), permite continuar en el cargo hasta los 70. Hice el pedido y nunca me contestaron", cuenta a Perfil.com la docente, que además es la primera doctora en psicología y la única Posdoctora en Psicología Clínica de la UNT.

En efecto, la ley 26.508 permite extender la jubilación hasta los 70 años a aquellos docentes con al menos "veinticinco (25) años de servicios universitarios docentes de los cuales diez (10) como mínimo continuos o discontinuos deben ser al frente de alumnos", dice su artículo primero. Además, da la opción al docente solicitante que continúe en su cargo previa evaluación, si es que él mismo lo solicita. "Yo hasta pedí continuar con una evaluación previa, pero no respondieron", agrega Gerez Ambertin.

Al aproximarse la fecha de su jubilación sin respuesta alguna, la docente, que también es directora del Doctorado en Psicología de la UNT, recurrió a la Justicia por medio de una medida cautelar para continuar en su cargo e impuso un recurso de amparo para que la Facultad de Psicología responda a su pedido. "El juez federal Mario Racedo respondió en 72 horas lo que la universidad no hizo en 60 días", asegura Gerez Ambertin.

El juez Racedo, por caso, resolvió ordenar a la Facultad de Psicología de la UNT que proceda a no modificar la situación de la docente hasta tanto la Facultad se expida. Y por eso, la docente todavía continúa dando clases y participando de las investigaciones universitarias que obtuvo por concurso.

Según Gerez de Ambertin, la debida adecuación de los estatutos, reglamentos y resoluciones de la universidades nacionales a la nueva Ley de Jubilaciones de Docentes Universitarios ya es practicada por varias casas de altos estudios del país, pero ante su solicitud se demuestra que en la UNT esa adecuación todavía está pendiente. "No es posible que ante una ley nacional, la Universidad se siga rigiendo de una resolución. Están peleando para ganarme un año medio, pero yo peleo por mi dignidad", destacó la docente.