A más de cuatro días del temporal que castigó a la provincia de Buenos Aires, continúan las consecuencias para muchos vecinos de la Ciudad: siete barrios continuaban ayer sin luz, mientras que en otras zonas había baja tensión del suministro eléctrico. Además, los vecinos reclaman que falta agua y que los trámites para cobrar el subsidio por la inundación son engorrosos y complicados.
Betiana Montiel vive en Murguiondo al 1500, en el barrio de Mataderos, y desde el martes a la mañana está sin luz ni agua. “Este es un edificio de ocho pisos donde vive mucha gente mayor, por eso nos turnamos para llevarles baldes con agua”, explicó la damnificada. En su caso, el consorcio realizó los reclamos a la empresa eléctrica, pero todavía no hubo respuesta. “Desde que se cortó el suministro responden que en 48 horas lo van a restablecer, pero todavía seguimos esperando”, dijo.
Cerca de su departamento, por la avenida Alberdi a la altura de Larrazábal, la situación era un poco más alentadora: desde el martes a la madrugada no hubo luz y, según Montiel, “era una boca de lobo”. Durante más de 48 horas no funcionaron los semáforos y algunos locales todavía trabajaban a oscuras o con generadores eléctricos.
Ayer, la necesidad de los vecinos chocaba con la versión de las empresas responsables del suministro eléctrico. Al cierre de esta edición, voceros de Edesur señalaron que 95 por ciento de la red se había normalizado, y agregaron que “podrían existir lugares puntuales” sin servicio. Desde Edenor, explicaron que sólo quedaban 900 clientes con baja tensión. Ambos coincidieron en que esta mañana el suministro estará restablecido en toda la ciudad.
Mauricio Macri se metió ayer en la polémica y cuestionó a las empresas eléctricas: “Edenor y Edesur están cada vez con más problemas”, expresó. En declaraciones a Radio Mitre, el Jefe de Gobierno porteño advirtió que “si no se invierte hay involución, y es lo que está pasando”.
Vecinos de Floresta reclamaban anoche por la falta de suministro eléctrico. “Desde el día de la lluvia nos cortaron el servicio y nunca volvió”, indicó Melisa Saredo, quien vive en Segurola al 700. Por la avenida Juan B. Justo los vecinos quemaron contenedores de basura en reclamo a las compañías de electricidad. “Cuando llamo a la empresa atiende un disco automático que te da un número de reclamo y te corta”, se queja Saredo, quien expresó que “los trámites para recibir el subsidio del Gobierno porteño son engorrosos: piden muchos papeles, algunos los tengo, pero otros se perdieron con la inundación”.
Julieta Costa Díaz, integrante de la junta comunal de Belgrano y Núñez por el Partido Socialista, indicó ayer que en esa zona la luz volvía de a poco y afirmó que ya no quedaban lugares inundados. “La nuestra fue la peor comuna, en algunos edificios entró un metro y medio de agua”, remarcó.